Una flor paraguaya

Este artículo tiene 22 años de antigüedad

Hay nombres y personas cuya memoria, por algún motivo importante, con el transcurso de los años se vuelve patrimonio de toda la sociedad. Uno de esos nombres es el de una mujer que cautivó a sus contemporáneos por su excepcional belleza y donaire. Ella se llamó Anselmita, fallecida hace treinta años.