Miles de productores/ a nivel mundial se encuentran abocados a la producción más saludable. Con mucho éxito, en EE.UU. y Europa crece la producción, el comercio y el consumo de productos ecológicos y América Latina produce para abastecer esos mercados, pudiendo desarrollar también los suyos con más autonomía y soberanía alimentaria. Las investigaciones, capacitaciones y transferencia de conocimientos deben priorizar esa dirección. En este contexto, la Red de Acción en Plaguicidas y sus Alternativas en América Latina (RAPAL), plantea a las autoridades de la salud y la producción en especial, tomar con mucha seriedad las informaciones de instituciones especializadas como el Instituto Internacional del Cáncer (IARC/OMS), de la FAO, que recomienda a todos los países, tomar medidas con los plaguicidas altamente peligrosos y tomar en cuenta los riesgos para la salud de la población a corto y largo plazo. Fuente: Alicia Jiménez – Alter Vida
