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SAN JOAQUÍN (Víctor Daniel Barrera Burgos, de nuestra redacción regional). La comisión pro restauración del templo realizó innumerables pedidos al Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) para mejorar la reliquia histórica religiosa. Según datos, la estructura data de 1747, es decir, tiene una antigüedad de 270 años.
En el año 2007 se llevó a cabo la última reparación de la estructura. Fue restaurada parte el techo y se hicieron algunas mejoras de las paredes. Desde entonces la iglesia quedó prácticamente abandonada por parte de las instituciones competentes.
Ante los pedidos de la comisión pro restauración de que se realice una intervención total de la estructura, el MOPC se limita a realizar pequeñas reparaciones que rápidamente se descomponen nuevamente.
El techo del sitio sacro está muy deteriorado y con las fuertes lluvias se generan filtraciones del agua, que podían derretir los adobes de la pared y causar el derrumbe del templo.
La comisión pro restauración llevó a cabo actividades sociales y gestionó aportes de instituciones de la ciudad para comprar una enorme carpa con la que cubrieron parte del techo para evitar más filtraciones de agua de lluvia.
En junio de este año en una parte de la pared se formó un enorme boquete que puso en peligro de derrumbe la estructura y el templo tuvo que ser cerrado porque en días lluviosos resulta imposible permanecer adentro.
Un mes después el MOPC realizó una reparación a medias del enorme agujero, pero el techo y toda la estructura continúan igual, en peligro de desplome.
La carpa ya está totalmente rota y se encuentra colgando de las alas del techo del templo. Nuevamente las tejas totalmente removidas están expuestas a la intemperie y toda la estructura se encuentra nuevamente en serio peligro.
El párroco de San Joaquín Lucio Vargas, lamentó la situación en que se encuentra el templo y la falta de respuesta de las instituciones del Estado. Indicó que la iglesia es uno de los tesoros más valiosos del departamento y de nuestro país.
En su momento, el jefe del departamento técnico del MOPC, arquitecto José Kronaweter, explicó que los trabajos que se realizaron fueron sólo de carácter urgente para evitar que las fallas de la estructura empeoren y así salvaguardar el bien patrimonial. Indicó que para la reparación total del templo se debe realizar el protocolo de intervención, que se hace juntamente con la Facultad de Arquitectura de la Universidad Nacional de Asunción (UNA).
Una vez que se termine se debe remitir a la Secretaría Nacional de Cultura (SNC) que debe aprobar el proyecto de mejora para su intervención. Añadió que los trabajos se estarían iniciando entre marzo y abril de 2018.