En estos 25 años de consolidación en el mercado, La Pradera pasó por el cambio de la ubicación de su planta industrializadora, que inicialmente estaba en el Chaco, y en la actualidad opera en Capiatá, desde hace cuatro años.
El bien más preciado de esta marca de lácteos está en la formulación de sus productos, con la que logra que se destaquen por su sabor y la utilización de materia genuina. Así también, otro pilar fundamental que soporta y mantiene la calidad e inocuidad constante de sus productos es la certificación de calidad, que año a año es actualizada.
Este año, La Pradera fue certificada por la FSSC 22.000, la máxima certificación de calidad e inocuidad de alimentos. “Esto nos posiciona como una de las primeras industrias lácteas nacionales con dicha certificación”, destaca Violeta Ceuppens, presidenta de la empresa.
Comenta que como empresa comprometida, La Pradera acató todos los protocolos necesarios para seguir operando normalmente en este tiempo de cuarentena a raíz de la pandemia del covid-19. “Orgullosamente desde el primer día hemos adaptado las instalaciones a las exigencias para dar seguridad a nuestros operarios y a nuestros clientes. Es un tiempo difícil, atípico, en donde planificar con tiempo anticipado es casi imposible, las cosas cambian a diario y nos vamos adaptando”, expresa la empresaria.
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Como empresa proveedora de materia prima al mundo gastronómico, esta industria al igual que otras de su rubro, se vio afectada a nivel económico por todos los locales cerrados. “Las líneas de consumo han cambiado, algunas líneas han disminuido drásticamente su consumo y se han equilibrado con otras. Los plazos de cobros forzadamente, en muchos casos, crecen y esto genera incertidumbre, por lo cual nos vemos obligados a experimentar nuevos canales como el delivery y la venta minorista en nuestros puntos de ventas propios”, detalla Ceuppens.
La Pradera procesa 100.000 litros de leche por día. Así obtiene una gran variedad de productos como quesos Paraguay, cuartirolo, mozzarella, sándwichs y ricotta. También dulce de leche familiar, repostero, heladero y con chocolate.
Asimismo, postres lácteos como arroz con leche, postre de vainilla, chocolate y dulce de leche. También yogures en líneas enteras, dietéticas y el yogur griego. Leche descremada y bebidas lácteas como las fermentadas, con base láctea y chocolatada. “Nuestros productos que más se destacan son el queso Paraguay y los dulces de leche La Pradera”, resalta la presidenta de la empresa.
Empresa produce con tambo propio
La Pradera cuenta con un tambo modelo propio de la empresa Cabaña Loma Verde, que se encuentra en Arroyos y Esteros. Además, acopian de las colonias de Nueva Durango y Manitoba, de más de 400 tamberos.
Tiene su centro de distribución propio, desde donde se despachan los productos a todos los puntos de ventas. Su logística de distribución es principalmente tercerizada.
Los productos de La Pradera se ajustan al mercado y son competitivos evaluando la calidad de los mismos y las materias primas genuinas con que se preparan.
Emplean a más de 600 personas de manera directa y otras 2.000 de forma indirecta.
“Estamos orgullosos de pertenecer y de crecer con el sector lechero nacional, produciendo con calidad e innovación. Esperamos ansiosos la recuperación de nuestro país y sobre todo, de los sectores más afectados por esta pandemia, en donde indirectamente nos vemos afectados por el sector gastronómico, con quienes tenemos estrecha relación”, afirma.