Destaca que Venezuela pasó de tener una inflación de 9.585,5% en 2019 a 844,1% en 2020, pero aún sigue en la senda de la hiperinflación, mientras que Argentina bajó del 53,8% al 36,1%. Aunque el Banco Central asegura que esta estadística es del 844,1%, la Asamblea Nacional (Parlamento), de mayoría opositora hasta comienzos de enero, informó en diciembre último, que era del orden del 4.087%. “Cuando estás hablando de cifras de miles por ciento de inflación, decir que mejoró, cuando mantienes un proceso hiperinflacionario y en el cual la moneda pierde completamente sus funciones, es muy relativo. El 2020 sigue siendo terriblemente malo para Venezuela en términos de estabilidad “, le aseguró a Efe Luis Vicente León, presidente de la encuestadora venezolana Datanálisis. El dólar suplantó al bolívar en casi todas las transacciones, pero el lado más doloroso de esta dolarización a la fuerza se ve en el salario mínimo, oficialmente de 400.000 bolívares que, por la hiperinflación, se traduce en menos de un dólar al mes, con lo que solo se compra el 0,72% de la canasta alimentaria.
Alerta por rebrote inflacionario en Argentina
La baja de un poco más de 17 puntos porcentuales de inflación en Argentina con respecto a la de 2019 no parece, según expertos, una gran noticia. “En 2020, la tasa de inflación argentina fue preocupantemente alta, especialmente a la luz de la fuerte contracción económica. Desafortunadamente, es probable que en 2021 va a empeorar. Los economistas que fueron encuestados por el Banco Central de Argentina esperan que la inflación aumente a casi el 50% en 2021”, le dijo a Efe Benjamín Gedan, subdirector del Programa de América Latina del Wilson Center. No obstante, un escenario de hiperinflación no parece muy probable en Argentina, aunque hay signos de preocupación”. Dado que el nuevo gobierno de Argentina (el del peronista Alberto Fernández) no tiene interés en recortes presupuestarios serios, ha estado imprimiendo pesos para cubrir su alto déficit, lo que genera temores de una inflación en espiral”, opinó Gedan. Argentina, pese a la reestructuración del pasado agosto de la deuda de US$ 65.000 millones contraída con organismos como el Fondo Monetario Internacional (FMI), sigue excluida de los mercados de capital y esto también limita al gobierno a la hora de contener la inflación.
Brasil, con la inflación más alta desde 2016
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Sin comparación con Venezuela o Argentina, Brasil también cerró 2020 con un índice preocupante de inflación del 4,52%, la más elevada desde 2016, y por encima de la meta de 4,0% fijada por el gobierno para el año. También al alza, el índice de inflación anual en México se ubicó en 3,15%, mayor a la de 2,83% registrada en 2019, pero menor a la de 4,83% de 2018.
En el sur del continente, Chile se mantuvo estable con 3% de inflación, impulsado por una subida en el vestuario y calzado y en el rubro del equipamiento y hogar. La cifra inflacionaria se situó así en el centro del rango de tolerancia del Banco Central de Chile, de entre el 2% y el 4%.
Uruguay cerró el año con un Índice de Precios al Consumidor (IPC) del 9,41% en comparación con el 8,79% de 2019. La inflación en Perú llegó al acumulado del 1,97% en 2020, cifra que está dentro del rango establecido de hasta el 3%.
Ecuador y Panamá, en deflación
La economía ecuatoriana sufrió deflación del -0,9% como producto de la pandemia. Panamá también terminó 2020 con una deflación del -0,8%, según el Ministerio de Finanzas de Panamá.
Bolivia a su vez concluyó el año pasado con inflación de 0,67%, un número por debajo del registrado en 2019, cuando el índice llegó a 1,47%.
La inflación en Colombia se ubicó en 2020 en 1,61%, la cifra histórica más baja desde 1955, cuando se comenzó a registrar la variación del IPC.
Paraguay con 2,2%
Un 2,2% de inflación registró la economía paraguaya en 2020, un 0,6% por debajo de lo consignado en 2019. Paraguay basa su recuperación para este año en obras e inversión extranjera.
“Se espera un 2021 de reencuentro y recuperación económica, basada en la ejecución de proyectos de infraestructuras y en la atracción de la inversión extranjera, tras dos primeros años de Gobierno marcados por la recesión y el coronavirus”, destacó Efe, sobre declaraciones del presidente Mario Abdo Benítez. Añade que todas las obras de infraestructura planificadas para sus cinco años de mandato están en proceso de ejecución. En cuanto a las estimaciones del Banco Central del Paraguay (BCP) proyectan un rebote del 4% para este año, tras una caída del 1% en 2020, según el cierre provisional. A pesar de ello, el Gobierno se apoya en datos regionales del Fondo Monetario Internacional (FMI), en los que Paraguay es uno de los países que menos notarán en su PIB el impacto del coronavirus.
Sin datos en Nicaragua
El Banco Central de Nicaragua aún no da a conocer ese indicador; sin embargo, en un informe divulgado en diciembre redujo la proyección de la tasa de inflación de 2020 a un rango de entre 2% a 3%, menor a la estimada de 3,7% proyectada inicialmente. Nicaragua cerró 2019 con inflación del 6,13%. A su vez, El Salvador tampoco ha dado a conocer oficialmente sus datos, pero según informes del Ministerio de Economía, la inflación acumulada entre enero y noviembre fue de -0,28%, mientras que en el mismo lapso de 2019 se situó en -0,11%. Costa Rica tuvo inflación del 0,89%, inferior a la de 2019 cuando fue del 1,52% y el tercer porcentaje más bajo de la última década después del -0,81% del 2015 y 0,77% de 2016.
Honduras cerró el 2020 con inflación de 4,01%, en rango previsto por autoridades económicas. La inflación fue inferior en 0,07 puntos porcentuales a la observada en 2019 (4,08%) y se ubicó dentro del rango meta establecido (4%).
El IPC de Guatemala acumuló en 2020 una inflación del 4,82%.
República Dominicana tuvo inflación de 4,63% en 2020, ligeramente superior al rango de entre 1% y 4% establecido para 2020. Por su parte, Cuba no publica regularmente sus indicadores o lo hace con varios meses de demora, de modo que se desconoce la cifra de inflación de 2020, mientras la de 2019 fue del 5,5%.