El objetivo de esta ponencia es exponer algunas ideas de cómo podemos aumentar la eficiencia administrativa de la Itaipú, margen derecha. ¿Cómo se pueden obtener mayores ingresos socioeconómicos de un complejo hidroenergético recordista mundial?
En lo técnico nadie duda; uno de los caminos históricos fue el aprovechamiento máximo del caudal hidráulico sobre-explotando las veinte máquinas; es decir, incluyendo las dos de reserva. Este camino depende exclusivamente del caudal del río Paraná, que a su vez depende del régimen pluviométrico en la cuenca alta. La Itaipú, en modo de piloto automático, lograría esto con una sola dirección, la técnica. Lo demás no debería pasar de asesorías. Al final, la Itaipú no pasa de ser una usina hidroeléctrica.
En la economía contemporánea prima el concepto del desarrollo sostenible. Es decir, mantener los rendimientos en el largo plazo, sin afectar el medio. Este, a su vez, se sustenta en varios pilares: la solidaridad, la equidad, el uso mesurado de los recursos naturales, el combate al consumismo salvaje, las patentes y los descubrimientos. En fin, me atrevería a decir que todo esto proviene del tesoro supremo del hombre: la libertad. Naciones que han caído en la miseria y el atraso están precedidos por dictaduras y la destrucción de sus medios.
Es bueno recordar entonces que la prosperidad de las naciones depende más de la inteligencia de sus líderes que de sus propios recursos naturales. La mejor prueba de lo antedicho está en los países africanos que producen grandes cantidades de oro y diamante, pero están sumidos en la pobreza. Otro ejemplo contemporáneo es Venezuela, dueña de la mayor reserva petrolífera del mundo, pero inmersa en un caos sociopolítico y económico. Como ejemplo nacional usaremos a la Itaipú y Yacyretá; dos modelos entreguistas que nunca debieron tener tantos años de vigencia.
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La economía también estudia fenómenos indeseados, como el monopolio, el dumping y las asimetrías en el acceso a las informaciones. Estos monstruos se disfrazan magistralmente en las grandes corporaciones y los partidos. Una de las formas que encontraron para “aggiornarse” a la economía tradicional es el concepto de la “responsabilidad social”. La gran empresa gastando una minúscula parte de sus ingresos en los pobres. La economía de mercado pactando con la economía social. La derecha negociando con la izquierda.
Los “gastos sociales” comenzaron tímidamente en la Itaipú en la era de Nicanor como presidente del Paraguay y Lula como presidente del Brasil. Fue incorporado en la nueva “visión y misión” de Itaipú. Inicialmente eran 15 millones de dólares anuales, hoy es de US$ 70 millones. ¿Es poco, respetable o mucho en un presupuesto anual de US$ 3.291.000.000 esta cifra? Proporcionalmente representa solo el 2,12%. Algunos, como los ingenieros de 60 Hertz (paraguayos brasileristas), dirán que es muy buena plata. Hace 45 años que vienen defendiendo la tesis de que “solo pusimos el agua”. Son los mismos que entregaron Yacyretá en el último Acuerdo Cartes-Macri.
Pero vayamos al objetivo de esta entrega ¿Cómo podemos disminuir los costos y al mismo tiempo aumentar los rendimientos, sin sobre-explotar las 20 máquinas? La crítica a los 200 gerentes viajeros que pasan dos días en Asunción, dos días en Hernandarias y otro viajando, ya fue abordado en el artículo anterior (**). Pero existe otra idea que causará el escozor de la alta gerencia y a los nueve sindicatos: la disminución del Directorio y del Consejo a la mitad de los miembros actuales, con todo su séquito.
¿Cómo se sustenta esta tesis? Esta idea se alinea estratégicamente en el objetivo estratégico, OE 2: Equilibrio económico-financiero y en el OE 3: Sostenibilidad empresarial. Ninguna de estas ideas contradice la estrategia empresarial, por ello lo estoy presentando como una idea innovadora en el concurso interno Eureka, versión 2018.
Por otro lado, existe un documento oficial: “Dimensionamiento del cuadro del personal“, proveniente de la RDE 074/98, aprobada por RCA 025/98, el anexo de la RDE 175/98, así como de la DET/GP 045/03, y de la nota reversal 228 que insería en la nueva misión y visión de la IB, el concepto de “responsabilidad social y ambiental”. Anterior a esto el Consejo de Administración, en el Acta N° 125 de fecha 18/06/93, había encomendado al Directorio Ejecutivo el estudio destinado a encontrar la fuerza laboral adecuada, “basada en la experiencia de grandes hidroeléctricas”. Tres empresas, administradoras de grandes usinas hidroeléctricas resultaron ganadoras de trabajos de consultorías; ellas son: Bureau of Reclamation (EEUU); B.C. Hydro Internacional (Canadá) e Hydro Québec Internacional (Canadá).
La Bureau of Reclamation propone 3.000 empleados totales (para ambas márgenes); mientras que la Hydro Québec Internacional propone 1.033 empleados, pudiendo adicionarse eventualmente 200 más, es decir, 1.233 empleados totales (para ambas márgenes) y la centralización de las actividades en la Central hidroeléctrica de Hernandarias. La Hydro Internacional, que no considera la binacionalidad y algunos órganos de apoyo, como el caso de los gabinetes y las asesorías, recomienda 1.617 empleados totales (para ambas márgenes). Si esto lo relacionamos a las memorias y balances 2016 y 2017 donde la entidad erogó: 79.149.000 y 98.081.00 U$ respectivamente, veremos que con la adecuación a cualquiera de los resultados de las consultoras mencionadas, tendremos un ahorro significativo de aproximadamente 30%, es decir, US$ 30.000.000 por año. En esto no se considera la disminución de 6 a 3 direcciones por margen: General, Técnica y Administrativa y financiera, así como el Consejo de Administración, a cuatro miembros por margen.
Con estas medidas, la disponibilidad y confiabilidad del sistema energético no se verá disminuido en absoluto. El costo/beneficio mejorará significativamente para los Estados partes, y considerando que: 1. La empresa está pasando por un proceso de licenciamiento del 30 a 40% de su cuadro laboral en los próximos tres años por jubilación y 2. La diferencia entre el modelo anterior, con dos sedes migratorias contra una centralizada, será redestinada a la población en general, solo podemos esperar beneficios. La riqueza de la Itaipú será mejor distribuida y la población en general estará muy agradecida.
El hecho de adecuar el cuadro del personal a parámetros internacionales, en los que tres consultoras de prestigio coincidieron, representa un aumento de la eficiencia y de la seguridad energética. Si mejoran los costos/beneficios de un proyecto o empresa, eso reditúa en forma directa e indirecta a toda la población de los Estados partes.
La responsabilidad socioambiental no será afectada en ningún sentido, porque lo ahorrado será redistribuido a los Estados partes en sus programas de gobierno y en sus políticas públicas. Si ahorramos en salarios y viáticos destinados a una élite social, estos montos pueden ser recapitalizados en los programas de educación, salud, seguridad y mejoramiento de la propia infraestructura energética de ambos países.
(*) Ex Superintendente de Energías Renovables IB
(**) Consulta de empleados y sus viáticos: https://www.itaipu.gov.py/sites/default/files/Informe%20Agosto-2018