El espejo roto (adaptación) (3)

Este artículo tiene 6 años de antigüedad
El espejo roto (adaptación) (3)
El espejo roto (adaptación) (3)Archivo, ABC Color

¿Logrará el pobre muchacho recuperar a la princesa y su castillo? Veamos el final de este relato.

—Debes arrebatárselo —le ordenó el rey de los ratones.

Y el ratoncillo, con dos compañeros, se dirigió al palacio.

Llegaron dos días después y sorprendieron a la vieja durmiendo.

Uno de los ratoncitos le introdujo la cola en su nariz, para hacerla estornudar, momento que aprovechó otro ratón para apoderarse del espejo, que ella guardaba bajo la almohada.

Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy

Regresaron con su botín y se lo entregaron al joven, quien, en agradecimiento, se llevó al gato asesino de ratones.

Cuando se hubo alejado un tanto, sacó el espejo y, al aparecer el genio, le pidió un traje real, un soberbio caballo y un gran ejército de soldados. Con todo ello se dirigió al palacio del rey, lo cercó y obligó al monarca a que le entregara a su esposa.

A la vieja se la llevó el genio, para darle su escarmiento, y el joven matrimonio vivió feliz gracias al maravilloso espejito roto.

Sobre el libro

Libro: Mis cuentos

de hadas

Título: El espejo roto

Editorial: Cuenticolor