Estructura (elementos que lo componen)
Un sintagma nominal se compone de un único elemento obligatorio, el núcleo, que puede ir acompañado de distintos determinantes y complementos o modificadores: adyacente, aposición, complemento del nombre (CN), proposición adjetiva o sustantiva.
Núcleo (N):
- Sustantivos: Luis, Londres, flor, belleza, lata, enjambre, jauría, abrelatas, florería...
- Pronombres: ellos, tú, nadie, alguien, estos, algunos, cientos, quién, ninguno...
- Palabras sustantivadas: lo necesario, el azul, la rubia, el azul marino, lo peor...
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Determinantes
Un determinante es un tipo de palabra que acompaña a un sustantivo. Su principal función es, como su buen nombre indica, determinarlo, estableciendo así relaciones de especificidad con respecto al mismo. Los determinantes concuerdan en género y número con el nombre al que determinan, siempre. También ocupan siempre la misma posición con respecto al sustantivo, es decir, lo preceden, situándose inmediatamente antes que dicho nombre.
- Artículos determinados: el, la, los, las.
- Artículos indeterminados: un, una, unos, unas.
- Determinativos demostrativos: este, ese, aquel, aquellos...
- Determinativos posesivos: mi, tu, su, nuestro...
- Determinativos numerales cardinales: dos, cinco, veinte...
- Determinativos numerales ordinales: tercero, quinto, séptimo...
- Determinantes numerales múltiplos: doble, triple, cuádruple...
- Determinantes numerales partitivos: tercio, cuarto, quinto, onceavo...
- Determinantes exclamativos o interrogativos: qué, cómo, cuántos...
- Determinantes relativos: cuyo, cuya, cuyos, cuyas.
La función de adyacente, sea modificador directo o modificador indirecto, la realiza un adjetivo calificativo. Esta clase de palabras acompaña siempre a un sustantivo; por eso, el adyacente forma parte del sintagma nominal, y entonces puede pertenecer al sujeto, al complemento directo o al complemento indirecto, pues todos ellos son sintagmas nominales.
El adjetivo calificativo añade cualidades al sustantivo que le precede o que le sigue, y ya con eso es fácil detectarlo.
Pero hay un pequeño truco para comprobar claramente cuál de las dos palabras es el adjetivo.
Pregúntate mentalmente: ¿Cómo es el supuesto sustantivo? ¿Cómo está el supuesto sustantivo? La respuesta te la dará el adjetivo, no el sustantivo
Ej.: - Me gustan las flores amarillas – ¿Cómo son las flores? – amarillas (adjetivo).
- Ese señor elegante debe comprar los autos caros. ¿Cómo es ese señor? – elegante (adjetivo). ¿Cómo son los autos? – caros (adjetivo).
La aposición puede ser de dos tipos:
a. Especificativa: es un sustantivo que acompaña al núcleo y se une a él directamente, sin comas: el río Paraná, su hermano Evaristo, la marca Toyota.
b. Explicativa: es un sintagma nominal que modifica al núcleo y va siempre entre comas (puede contener dentro de sí un sintagma preposicional): Madrid, capital de España; Luis, su hermano; esa señorita, mi colega.
