Viajeros que se trasladan en vehículos particulares manifestaron que en épocas de sequía la quema de pasturas se realiza de noche y de día. Los conductores manifestaron preocupación al respecto, ya que se trata de una trampa mortal porque cuando el fuego es de grandes proporciones, la visibilidad se reduce notablemente.
Si es de noche, la posibilidad de que ocurra algún accidente se acrecienta, advirtieron los automovilistas.
José Mutti, comandante del Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Ayolas, expresó que permanentemente realizan intervenciones para sofocar los incendios en las praderas. Inclusive, se registra cerca de poblados, como ocurrió recientemente en la compañía Ko’êju, de este distrito.
Mutti agregó que normalmente se busca que sea una quema controlada, pero cuando hay una pronunciada sequía y fuertes vientos, el fuego se propaga rápidamente.
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El comandante de los socorristas denunció, además, que periódicamente cazadores furtivos provocan de manera intencional quemazones en la reserva de la binacional Yacyretá.