Para que todo saliera perfecto, Gabriela y David decidieron dejar la organización a cargo de Clara Costanzo y su staff, quien los orientó en todo momento con el fin de que los novios tuvieran la boda de sus sueños. En la decoración, Susana Pangrazio tomó la posta. Los asistentes se deleitaron con el bufé frío y caliente preparado por Talleyrand. La música para bailar estuvo a cargo del DJ Miki Prats y los Mequetrefes. Los novios disfrutaron su mágica velada, al igual que los cientos de invitados, quienes acudieron al evento, felices de ser parte de aquella celebración. Miami y Cancún fueron los destinos elegidos por la pareja para pasar sus primeros días como esposos.
