Reinician cosecha de maíz tras días soleados

CIUDAD DEL ESTE (De nuestra redacción regional). El ingeniero Aurio Frighetto, presidente de la Coordinadora Agrícola del Paraguay (CAP), filial Alto Paraná, señaló que las lluvias de junio “están dando sus frutos negativos en el campo” con relación al maíz. El mayor daño se observa en la calidad del producto durante la recolección del grano.

No obstante, el titular de la CAP manifestó que existe una pérdida que ronda entre el 15 y el 20 por ciento del cultivo de maíz de segunda zafra en esta zona.

Frighetto alegó que de las 350.000 hectáreas de maíz cultivadas, más del 40% de la plantación fueron afectadas por la excesiva lluvia que se tuvo en junio último.

En ese contexto, manifestó que los productores volvieron al campo a fin de aprovechar el clima seco de las últimas semanas y culminar con la cosecha del maíz zafriña. “Los productores están retornando al campo para recolectar el grano luego de las lluvias que tuvimos en este departamento”, dijo el representante del gremio.

Por otra parte, Frighetto aclaró que los perjuicios aún no pueden ser cuantificados en su totalidad, ya que la cosecha se está desarrollando.

“Aún no tenemos el panorama definitivo de los efectos que dejó la lluvia, ya que sigue habiendo maíz en las chacras esperando ser cosechadas”, expresó.

En el décimo departamento se expandió el área de cultivo de maíz en un 4,6% con respecto al año pasado. Alcanzó unas 350.919 hectáreas plantadas en la presente zafra.

Según estimaciones de la CAP, de cada tres hectáreas de maíz que se plantan en Paraguay, poco más de una hectárea están en Alto Paraná.

La siembra del maíz zafriña permite la rotación de cultivos, lo que consiste en sembrar gramínea después de leguminosa (soja), para proteger al suelo y generar ingresos extras.

El Ing. Rubén Sanabria, vicepresidente de la CAP, dijo que se logrará un rendimiento promedio de 3.800 kilos por hectárea en el Alto Paraná. Resaltó que algunas zonas menos afectadas por la humedad llegan a 6.800 y 7.000 kilos por hectárea. Añadió que el precio por tonelada a nivel internacional está entre 100 dólares (G. 430.000) y 120 dólares (G. 525.000).