Tras el paréntesis de la pandemia y la crianza de sus dos hijos de 4 y 6 años, Cortés se mostró "contentísimo" en la presentación de un espectáculo en el que los asistentes "disfrutarán de algo único".
Su previsión es ofrecer shows durante tres años en Suramérica, México, EE.UU. y Canadá, Australia y en países de Asia, África y Europa, dijo.
"La gente con el flamenco se vuelve loca, se emociona muchísimo, más que aquí. Aplauden más que en España", afirmó Cortés.
"Un recorrido en el tiempo"
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El nuevo espectáculo es para Cortés "un recorrido en el tiempo" que mostrará la pureza de la música y la danza: "Es un musical flamenco, es el estilo que yo creé hace más de 30 años".
Fiel a sus raíces, el bailaor ofrece en esta "superproducción" de 17 músicos en vivo y una decena de bailarines una fusión coreográfica que mezclará varios estilos de danza, con música flamenca, árabe, clásica o latina.
"Van a disfrutar de algo único", prometió.
Joaquín Cortés se siente ahora "feliz, afortunado y pletórico" por dar inicio este espectáculo a gran escala a sus 55 años, que afronta con varias "lecciones aprendidas" tras ser padre: "Ahora yo soy un papá. No seré el mejor padre pero esto de cambiar pañales, de estar con los niños, ese apego me ha hecho cambiar muchísimo para bien".