Un homenaje en clave de emoción y ritmo

El maestro Óscar Barreto al frente de  la Jazzband “Disco Movies”, una orquesta versátil y enérgica, que aportó carisma y alegría al escenario.
El maestro Óscar Barreto al frente de la Jazzband “Disco Movies”, una orquesta versátil y enérgica, que aportó carisma y alegría al escenario.MARIA VICTORIA

En el marco del Mes de la Madre y la Patria, la Sala de Convenciones del Banco Central del Paraguay se llenó de emoción, talento y ritmo el pasado viernes 23, con un concierto homenaje que fue puro deleite para el corazón, bajo la organización de Coomecipar.

La velada, cargada de sentimiento, orgullo y una alta calidad musical, reunió a talentosos artistas nacionales en una propuesta diversa y cuidadosamente armada. Bajo la dirección del maestro Óscar Barreto, la Jazzband “Disco Movies” desplegó un repertorio variado que fue desde lo más sentido del cancionero paraguayo hasta clásicos internacionales de distintas décadas.

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Desde el primer acorde, la orquesta se mostró ajustada y poderosa. La apertura fue una bienvenida instrumental que permitió apreciar la precisión y energía del ensamble. Siguió “Gallito Cantor” de José Asunción Flores, interpretado por la orquesta en solitario, como guiño respetuoso a nuestras raíces sonoras.

Rodrigo Benítez fue el encargado de abrir el bloque vocal con la canción “Ne porã che Paraguay”, en una interpretación emotiva que conectó directamente con el público. Le siguió una tierna selección dedicada a las madres: “Para ti mamá”, “Una canción para mi madre” y “Che symi porã”, con la que Benítez logró una atmósfera íntima. Luego, volvió con clásicos populares como “A mi manera” y “Te he prometido”, interpretados con fuerza y sensibilidad.

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La Jazzband tuvo sus momentos de protagonismo en transiciones instrumentales, por ejemplo con “Last Train to London”, donde mostró todo su dinamismo y manejo del ritmo, evocando con soltura la atmósfera disco y pop de épocas pasadas.

Melisa Duarte aportó su carisma vocal y presencia escénica en canciones icónicas como “What a Feeling”, “I Will Always Love You” y “What’s Up”, generando una ovación tras otra. Su interpretación del popurrí de Pandora fue uno de los momentos más celebrados de la noche, combinando nostalgia con un sello personal muy cálido.

El repertorio se diversificó aún más con la presencia de Lidia González, quien ofreció interpretaciones conmovedoras y llenas de fuerza. Su voz potente y expresiva brilló en temas como “Mi buen amor”, “Como tu mujer” y “Qué bonita es esta vida”, logrando una conexión genuina con el público, que la acompañó con aplausos sostenidos.

Un momento de la gran actuación ofrecida por la cantante Lidia González.
Un momento de la gran actuación ofrecida por la cantante Lidia González.

El tenor Héctor Candia también tuvo un papel destacado con una selección de temas exigentes que ejecutó con aplomo: “New York, New York”, “Nothing’s Gonna Change My Love for You” y “Crazy Little Thing Called Love”, entre otros. Su popurrí de Luis Miguel fue recibido con entusiasmo, demostrando su versatilidad vocal y dominio escénico.

La segunda parte del concierto mantuvo el nivel en lo más alto, con pasajes como el popurrí instrumental “Disco Live’s”, que mostró a la orquesta en su esplendor, y una sección final que trajo de nuevo el espíritu nacional al centro del escenario. Melisa Duarte y Rodrigo Benítez unieron sus voces en “Mi Paraguay” y “Navegando hacia el sol”, regalando un momento de ternura y celebración.

Uno de los pasajes más memorables fue la interpretación de “Pájaro Campana”. Luego, Lidia González y Héctor Candia cerraron el bloque vocal con un dúo emotivo en “Lucerito Alba” y “Paloma Blanca”, dejando en el aire una sensación de belleza compartida.

El broche de oro fue “Bravo Paraguay”, himno de orgullo nacional, seguido de un bis con una selección que incluyó “Che la Reina” y “13 Tuyutí”.

El concierto no solo fue un homenaje a las madres y a la patria, sino también una muestra del talento y la sensibilidad de artistas que, con cada interpretación, recordaron por qué la música sigue siendo un puente entre generaciones.