Desisée Queirolo Destefano y Víctor Hugo Ortiz Medina conocieron su sentencia este miércoles en un juicio oral y público desarrollado en el Palacio de Justicia de Ciudad del Este. La mujer fue condenada a tres años por estafa, mientras que Ortiz Medina a dos años y seis meses por supuesta producción de documentos falsos.
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Los citados están acusados de integrar un esquema, que propició un millonario perjuicio a la empresa PK SA mediante transacciones fraudulentas. Rosana Elizabet Bogarín también está procesada en el caso y será enjuiciada próximamente.
Según la acusación del fiscal Alcides Giménez Zorrilla, el 24 de febrero de 2014, Bogarín Ramírez -a pedido de Queirolo Destefano- se presentó a la empresa PK SA, una importadora y representante de una marca de acondicionadores de aire.
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La compradora, en representación de la firma Ry R Comercial, concretó la adquisición de 100 aparatos de aire por valor de G. 137 millones, por cuyo monto entregó tres cheques de pago diferido a nombre de Queirolo.
Confianza con primer cheque
El primer cheque, de G. 52 millones, fue efectivizado sin inconveniente. Mientras que el restante de cheques, uno con vencimiento el 30 de diciembre de 2014 y otro el 23 de enero de 2015, fueron rechazados posteriormente en la ventanilla del banco por cuenta inhabilitada.
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Tras el cobro del primer cheque y antes del vencimiento de los otros dos, el 19 de diciembre de 2014, se realizó una compra similar. Bogarín, en nombre de R y R Comercial, adquirió más equipos por valor de G. 137 millones y entregó nuevamente tres cheques de pago diferido a nombre de Ortiz Medina. Estos tres cheques fueron denunciados como “extraviados”.
El Tribunal de Sentencia, compuesto por Óscar Génez, Evangelina Villalba y Lourdes Morínigo, concluyó que los acusados realizaron maniobras comerciales para ganar la confianza de la empresa afectada para posteriormente perpetrar un golpe superior a G. 200 millones.
Otra condena con caso similar
Queirolo Destefano registra una condena de cuatro años por un caso similar. La sentencia fue dictada en 2019 y la empresa perjudicada fue UniShop S.A, propiedad de Samir Abdul Hussein Soued.
El golpe se produjo en 2014 y consistía en la compra fraudulenta de casi 1.000 computadoras portátiles, además de celulares de afamadas marcas.
Para concretar la compra con cheques de pagos diferidos, la mujer había contado al comerciante afectado que supuestamente ganó una licitación del Gobierno para proveer los ordenadores. Sin embargo, se trataba de una mentira para la estafa.
Queirolo Destefano también afronta procesos penales por estafa tramitados en Pedro Juan Caballero.
