El cáncer de mama es muy frecuente en Alemania y Europa, comentó el doctor Pablo Ramírez, quien se recibió en el 2017 y partió para Frankfurt a especializarse en cirugía plástica. Su formación se basó en “la reconstrucción de mama en la que se usan los colgajos libres, tejidos que necesitan una irrigación con arteria y una vena para que transporten la sangre. En países del primer mundo se realiza de manera rutinaria”, explicó, “y por eso el seguro se hace cargo de todo el tratamiento, la retirada, la terapia y la reconstrucción”, amplió.
La técnica de microcirugía y anastomosis, dicho de manera sencilla, implica “separar de zonas donantes, abdomen, muslos y la región glútea, una porción que tiene una vena y una arteria. Se separa con un anteojo con lupa y luego se unen estos vasos sanguíneos en la región de la mama. Tienen tamaños milimétricos, dos a tres milímetros, y se unen con un microscopio”, detalló.
¿Es para todas las pacientes que hayan tenido una mastectomía? “Cualquier persona que haya perdido la mama es candidata a este tipo de cirugía, sobre todo, las mujeres que tuvieron radioterapia, que no tienen el tejido ideal son pacientes candidatas porque difícilmente pueden recibir prótesis mamarias”, manifestó. Otro aspecto de la cirugía plástica reconstructiva da cuenta de la utilización de “injerto graso, se inyecta tejido graso de abdomen o muslos que se trasladan a la zona mamaria cuando no fue muy grande la pérdida”, acotó el especialista.
Otra opción consiste en utilizar la prótesis mamaria, pero no todas son candidatas, reflexionó el cirujano. “Y lastimosamente la desventaja es que la prótesis no es la solución definitiva, sin embargo, con la cirugía con colgajos libres la ventaja es que el resultado es definitivo. La grasa se convierte en una grasa normal como cualquier tejido graso de otra zona del cuerpo”, describió el doctor Ramírez.
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El nombre de la técnica
Se denominan colgajos libres porque se desprenden totalmente de la zona donante, el galeno apuntó que “antes había que quitar piel con músculo y eso traía consecuencias, al sacar solo la piel y la grasa de abdomen y muslos con vasos microscópicos se evita el daño muscular”.
Y en el mundo de la estética siempre se puede mejorar más, así lo desarrolló el doctor Ramírez ya que “el exceso de piel y grasa retirados producen un abdomen plano, y un doble beneficio. Se hace al mismo tiempo una abdominoplastía; con este método quirúrgico en vez de desechar la piel y la grasa estas sirven como colgajos libres”.
La experiencia y los riesgos
El doctor Pablo Ramírez se encuentra formando su consultorio con el interés de realizar la técnica en nuestro medio. “El resultado en centros que realizan esta cirugía donde el tejido trasplantado es que sobrevive en un 98%. Es un tejido trasplantado y puede haber un rechazo o una falla, porque puede que los vasos sanguíneos no sean adecuados y que el colgajo se pierda. Siempre es una probabilidad pero a medida que se haga con más frecuencia eso va disminuyendo”, expresó.
Una mujer que ha sobrepasado el cáncer de mama se somete a un examen clínico previo y si esta bien de salud puede hacerse esta cirugía, consideró el doctor. “Hay que resaltar que la cirugía reconstructiva es una solución para mujeres que sufren porque han perdido la mama muy jóvenes, a los 40 años por ejemplo, con una carga emocional muy alta”, culminó.