Acné adolescente: cuando y cómo tratarlo

La adolescencia es la etapa de la vida que implica una serie de eventos que marcan el paso de la niñez a la vida adulta, el acné es un problema de salud muy frecuente en esta etapa. Tiene gran impacto psicosocial, pues puede ser motivo de discriminación y puede llegar incluso a la autoagresión, ya sea por la presencia de lesiones inflamatorias como por las secuelas cicatrizales que puedan quedar.

El acné se pueden presentar clínicamente como lesiones no inflamatorias (comedones abiertos y cerrados) y lesiones inflamatorias (granos rojos, con pus, nodulares y quísticos) todo esto acompañado de una piel más oleosa.
El acné se pueden presentar clínicamente como lesiones no inflamatorias (comedones abiertos y cerrados) y lesiones inflamatorias (granos rojos, con pus, nodulares y quísticos) todo esto acompañado de una piel más oleosa.MARTA ESCURRA

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“Es sabido que durante la adolescencia, la imagen corporal es de suma importancia para que la persona mantenga su autoestima alta”, refiere la dermatóloga, Lorena Pefaur.

Según la especialista, antes el acné era motivo de consulta sólo en los casos más severos, mientras que hoy en día, “instamos a los padres a traer a sus hijos cuando están desarrollando las primeras lesiones que son los comedones (más conocidos como espinillas)” agrega.

Beneficios de las consultas tempranas

Para la dermatóloga, entre los beneficios de las consultas tempranas se encuentra la posibilidad de prevenir o tratar las formas inflamatorias más graves e incluso disminuir el riesgo de cicatrices.

¿Cómo se forma el acné?

1. Obstrucción del folículo piloso.

2. Exceso de producción de sebo.

3. Sobreinfección por bacterias presentes normalmente en la piel.

4. Inflamación local.

¿Cómo son las lesiones?

Según menciona la profesional del cuidado de la piel, se pueden presentar clínicamente como lesiones no inflamatorias (comedones abiertos y cerrados) y lesiones inflamatorias (granos rojos, con pus, nodulares y quísticos) todo esto acompañado de una piel más oleosa.

Se localizan en lugares del cuerpo con mayor densidad de glándulas sebáceas como rostro, pecho, hombros y espalda.

Factores

Es importante saber que existen algunos factores que pueden desencadenar o empeorar el acné:

Cambios hormonales: Los andrógenos son hormonas que aumentan en los jóvenes durante la pubertad y que hacen que las glándulas sebáceas se agranden y produzcan más sebo.

Ciertos medicamentos: Corticoides; Sales de Litio; Vitaminas B12 y B6.

Algunos alimentos: Carbohidratos refinados, lácteos, grasas saturadas.

En cuanto al estrés, éste no causa acné, pero, si ya padece puede emporarlo.

Antecedentes familiares de acné en la adolescencia, etc.

Sobre el tratamiento

En cuanto al tratamiento, la Dra. Pefaur indicó que es una enfermedad perfectamente tratable a través de un buen diagnóstico clínico y sobre todo de la constancia y perseverancia del paciente. La decisión de que producto usar, sea tópico, vía oral o incluso con aparatología en los consultorios, dependerá de las características clínicas de cada paciente.

La problemática de la automedicación

“Uno de los mayores problemas con los que nos encontramos es la facilidad que ofrece el mercado para la adquisición de algunos fármacos dirigidos al tratamiento del acné, lo que favorece la tendencia a la automedicación motivados por diversas campañas propagandísticas en los medios de difusión masiva, tratamientos caseros o inadecuados de influencers y pseudo profesionales (no Dermatólogos) lo que se logra con esto es perder tiempo valioso para tratar de prevenir las temidas complicaciones como las manchas y sobre todo las cicatrices a largo plazo” manifestó Lorena.

“Por todo esto instamos a los padres y adolescentes a consultar de forma temprana con el Médico Dermatólogo quien es el especialista mejor calificado para tratar dicha afección. Y para mayor seguridad siempre comprobar que este certificado por la Sociedad Paraguaya de Dermatología” finalizó.

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