Estas cancelaciones de vuelos se habrían evitado si la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, hubiera tomado medidas en los últimos dos años, aseguró la empresa en un comunicado.
Michael O’Leary, CEO de Ryanair, incluso llegó a pedir a Von der Leyen que abandone su puesto: "hoy le volvemos a pedir que proteja los sobrevuelos de la semana que viene o que dimita".
"Si no está dispuesta a proteger el mercado único, vuelva a Alemania y deje que alguien competente se encargue de mejorar la eficiencia, la competitividad y de proteger el mercado único del transporte aéreo", añadió.
Entre las medidas propuestas, Ryanair citó la separación del espacio aéreo superior (dividir las rutas en niveles de altitud para garantizar la seguridad) o permitir que Eurocontrol (la Organización Europea para la Seguridad de la Navegación Aérea) gestione los vuelos durante las huelgas nacionales de controladores aéreos, tal y como ha pedido repetidamente la organización de compañías aéreas europeas, Airlines 4 Europe (A4E).
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"La presidenta Ursula von der Leyen afirma erróneamente que el control aéreo es una competencia nacional", cuando los sobrevuelos son una competencia del mercado único y, por lo tanto, están sujetos a la protección de la Comisión Europea, aseguró el comunicado.
Según recordó el texto, el informe Draghi, realizado por el expresidente del Banco Central Europeo Mario Draghi, ya alertó hace un año del coste de los retrasos en los vuelos, pero Von der Leyen "no ha hecho nada en los últimos 12 meses" para reformar el "deficiente" sistema de control aéreo europeo.
El comunicado remarcó que "las aerolíneas europeas siguen exigiendo que los servicios nacionales de control del tráfico aéreo cuenten con todo su personal para la primera oleada de vuelos matutinos" y a la Comisión Europea que "proteja los vuelos que sobrevuelan el territorio nacional durante las huelgas del control del tráfico aéreo".
Según la empresa, esto no socavaría el derecho de los controladores franceses a la huelga.
