“Un aplauso al servicio de bomberos”, propuso, a lo que la multitud a sus pies respondió entre palmas y vítores. Francisco llegó siete minutos tarde, despertando inquietud en las televisiones italianas que retransmiten el Angelus en vivo, al advertir que se trata de un incidente casi inédito.
El inhabitual retraso podría haberse debido a un problema de salud. Francisco aparenta una energía ilimitada pesa a su edad, pero en su juventud perdió parte de un pulmón, y las muecas de dolor que se le escapan ocasionalmente recuerdan que el dolor ciático es un compañero casi constante para el pontífice.