GINEBRA (EFE). “Mi preocupación es que la comunidad internacional termine viendo este conflicto como algo imposible de frenar”, dijo el presidente del CICR, Peter Maurer, en una rueda de prensa para conmemorar el inicio de un conflicto que ha provocado el desplazamiento interno de 6,5 millones de sirios, además de los más de cinco millones que huyeron del país y se convirtieron en refugiados.
Maurer pidió rehabilitar los servicios básicos para la población y ayudar a los sirios a reconstruir sus vidas, pese a que el conflicto continúa en algunas zonas.
El presidente de FICR, Francesco Rocca, agregó que se necesita un enfoque diferente por parte de la comunidad internacional, uno más humanitario.
“Las continuas hostilidades, la espiral de crisis económica, la crisis de refugiados que ha repercutido alrededor de todo el mundo y la pandemia de covid-19 han empujado a la población siria a extremos inaceptables. Desde hace una década los sirios viven en agonía”, lamentó por su parte el presidente de la Media Luna Roja siria (SARC), Khaled Hboubati, en vídeoconferencia desde Damasco.
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Más de 12 millones de sirios (el 60% de la población) sufren inseguridad alimentaria y medio millón de ellos malnutrición debido a que los precios de la comida han subido un 236% desde que comenzó la guerra.
En este contexto, trece millones de personas necesitan algún tipo de asistencia humanitaria, de las cuales ocho millones no pueden cubrir sus necesidades básicas y menos aún artículos de protección ante el coronavirus, como mascarillas o geles hidroalcohólicos, que son considerados un lujo inalcanzable.
El 90% de la población vive bajo el umbral de la pobreza, según la Cruz Roja.
Sus representantes describen una situación realmente grave en los hospitales ya que no hay ambulancias, ni respiradores, ni electricidad, lo que hace imposible almacenar sangre o la vacuna contra la covid-19, cuando llegue.
Además, 10.000 personas están buscando a sus seres queridos que siguen desaparecidos, asunto que supone una prioridad para el CICR.
“Creemos que la falta de información sobre los desaparecidos es uno de los obstáculos más importantes para conseguir la paz”, comentó Maurer.
“Siria es la operación más larga del CICR y la más complicada. La ayuda humanitaria ha sido bloqueada muchas veces y 65 voluntarios y trabajadores han muerto, además de todos los heridos y encarcelados”, concluyó.
UE enviará 130 millones de euros
La Unión Europea (UE) destinará un paquete de ayudas, valorado en 130 millones de euros, para los refugiados sirios y las comunidades locales de Jordania y Líbano en respuesta a la crisis de Siria.
El monto, que se financiará a través del Fondo Fiduciario Regional, irá dirigido a la protección social, los servicios sanitarios o la gestión de residuos.
En el Líbano, los fondos también ayudarán a mitigar las consecuencias de la explosión del puerto de Beirut, ocurrida en agosto del año pasado.
“La UE seguirá haciendo todo lo posible para apoyar al pueblo sirio, a la sociedad civil siria, a los refugiados sirios y a sus comunidades de acogida en los países vecinos”, afirmó este viernes en un comunicado el Alto Representante de la Política Exterior de la UE, Josep Borrell.
El vicepresidente recordó que este próximo 15 de marzo se cumplen diez años del inicio del conflicto, un “trágico aniversario” cuya crisis se ha visto agravada en los últimos meses por la continuación del combate, la pandemia de la covid-19 y el deterioro de la economía regional, que ha perjudicado las “pésimas condiciones de vida”.
Por su parte, el comisario europeo de Vecindad y Ampliación, Olivér Várhelyi, añadió que la UE está decidida a “estimular la recuperación a largo plazo de toda la región” a través de “importantes inversiones”.
El club comunitario acogerá los días 29 y 30 de marzo la quinta conferencia de Bruselas sobre " Ayuda al futuro de Siria y de los países de la región “, con el fin de reafirmar el apoyo internacional a los esfuerzos de la ONU para una solución política negociada del conflicto sirio.
Explosión de minas mata a 18
Al menos 18 civiles murieron y tres resultaron heridos ayer por la explosión de dos minas al paso de los vehículos en los que viajaban en una zona rural de la provincia de Hama, en el oeste de Siria.
Ambos artefactos, plantados por grupos armados antes de retirarse de la zona, detonaron al paso de dos coches cargados de ciudadanos que iban a recolectar trufas cerca de la ciudad de Salamiya.
Agregó que los heridos se encuentran en estado grave y han sido trasladados al Hospital de Salamiya, al tiempo que acusó a los grupos extremistas de sembrar minas y artefactos explosivos improvisados en aldeas y campos de haber plantado las minas antes de que las fuerzas sirias retomasen su control en 2018.