Por efectos secundarios la vacuna de AstraZeneca acumula controversias

LONDRES (AFP). Los problemas observados en algunas personas vacunadas con AstraZeneca no son trombos corrientes (formación de coágulos sanguíneos), como se informó en un principio, sino un fenómeno “muy atípico”, subrayó la Agencia Francesa de Medicamentos (ANSM).

Se trata de “trombosis de las venas grandes, atípicas por su localización (cerebral en su mayoría, pero también digestiva), que pueden estar asociadas a una trombocitopenia –un déficit de plaquetas sanguíneas– o a problemas de coagulación”, como hemorragias, según la ANSM.

¿Qué relación guarda con la vacuna? “No se probó ninguna relación de causalidad, pero es posible y se realizan análisis suplementarios”, dijo la Agencia Europea de Medicamentos (EMA).

Según cifras de la EMA, presentadas el pasado miércoles, se detectaron hasta 62 casos de trombosis venosas cerebrales en el mundo, incluyendo 44 en los 30 países del Espacio Económico Europeo (UE, Islandia, Noruega, Liechtenstein), por 9,2 millones de dosis de vacuna administradas.

El Reino Unido, que empleó en gran medida ese inmunizante, menciona 30 casos, entre ellos siete muertes, de un total de 18,1 millones de dosis administradas. Pero, como sucede con todos los medicamentos, la clave está en ponderar los riesgos y los beneficios.

¿A qué se debería? De momento, se existen varias hipótesis, que la EMA tendrá que aclarar. En un estudio publicado en línea el 28 de marzo –pero que todavía no fue evaluado por otros científicos– investigadores alemanes y austriacos mencionan un fenómeno asociado a la vacuna de AstraZeneca. “Se parece clínicamente a la trombocitopenia inducida por heparina (TIH)”, indicó el equipo de científicos de la Universidad de Greifswald).

La TIH es una reacción inmunitaria anormal, grave e inhabitual desencadenada en algunos pacientes por un anticoagulante, la heparina.