"Es un problema que tenemos que resolver", declaró Donaldson en su primer discurso como responsable de la principal formación de Irlanda del Norte, una región en crisis por el impacto que están teniendo los nuevos controles comerciales fronterizos impuestos por la salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE).
También advirtió de que el DUP debe comenzar a trabajar para evitar que "se den las condiciones" por las que Londres podría convocar un referéndum sobre la reunificación de la isla de Irlanda, la demanda histórica de la comunidad nacionalista que ha cobrado impulso por el Brexit, rechazado por la mayoría del electorado norirlandés en la consulta de 2016.
"Demasiado a menudo en los últimos años el unionismo ha ido a remolque del nacionalismo en la batalla constitucional, pues ya está planeando y diseñando el futuro. Nosotros debemos hacer lo mismo ahora. No podemos ir como sonámbulos hacia un referéndum fronterizo que otros llevan años preparando", señaló Donaldson.
Por ello, propuso, el unionismo "no solo debe defender su posición dentro del Reino Unido", sino "ser persuasivos" para convencer a la mayoría de los norirlandeses de que el interés de la provincia pasa por permanecer ligada a la corona británica.
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En ese sentido, subrayó la importancia de las elecciones autonómicas de 2022, en las que el Sinn Féin -antiguo brazo político del ya inactivo IRA- podría convertirse en el primer partido, e insistió en que el protocolo del Brexit debe ser eliminado.
Este arreglo para Irlanda del Norte fue acordado entre el Reino Unido y la Unión Europea como parte del Brexit, para evitar una frontera física entre la provincia y la República de Irlanda, a fin de proteger el proceso de paz firmado en Belfast en 1998 y sus respectivas economías, altamente conectadas.
En virtud de ese protocolo, la frontera comercial está situada en el mar de Irlanda al haber quedado Irlanda del Norte en el mercado único, por lo que los controles aduaneros para las mercancías procedentes de Gran Bretaña (Inglaterra, Escocia y Gales) se hacen en los puertos norirlandeses, lo que ha provocado el fuerte malestar de la comunidad unionista probritánica.
"La frontera en el mar de Irlanda no es solo una amenaza para la integridad económica del Reino Unido, es una amenaza para el nivel de vida de la gente de Irlanda del Norte y para la integridad constitucional del Reino Unido", afirmó Donaldson.
Donaldson fue confirmado el pasado sábado como el nuevo líder del DUP y se convirtió en el tercer responsable de la formación, sumida en tensiones internas, en apenas cincuenta días.