Los europeístas han logrado su objetivo, sacar ventaja firme al bloque de los comunistas y los socialistas de Vladímir Voronin e Igor Dodon, defensores de una política de acercamiento a Rusia, distancia que podría crecer al sumarse los resultados de las votaciones en el extranjero, que habitualmente les favorece.
Con un 93,67 % del recuento, el PAS lidera con el 47,72 %, seguido del bloque de comunistas y socialistas, que recabó el 30,87 %, y en tercer lugar, el populista Partido Shor, que pasa al Parlamento con un 6,34.
Las restantes formaciones políticas quedaron por debajo del 5 % necesario para entrar en el Legislativo.
EL FIN DE UNA ÉPOCA DIFÍCIL
Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy
"Confío en que hoy pondremos fin a una época difícil para Moldavia, confío en que hoy pondremos fin al gobierno de los corruptos", escribió en Facebook Sandu, que desde su llegada al poder luchó por un nuevo Parlamento, en el que pudiera apoyarse para llevar a cabo sus reformas.
"La gente debe sentir lo antes posible las ventajas de tener un Parlamento honesto y un Gobierno que se ocupe realmente de los problemas de la gente", añadió la mandataria, que aprovechó el momento para agradecer a quienes "le dieron un espaldarazo a la democracia moldava".
BORRÓN Y CUENTA NUEVA
Su principal contrincante, el expresidente moldavo y partidario del acercamiento a Rusia, Dodon, buscó un tono más conciliador llamó a hacer "borrón y cuenta nueva" tras estos comicios.
"Espero que a partir del día de mañana (...) comience una nueva etapa para Moldavia. No debemos permitir más crisis políticas", afirmó.
Según el socialista, la gente salió "masivamente a votar", por lo que pidió "estabilidad" para el país y pidió responsabilidad a las fuerzas políticas.
De los cerca de 3,5 millones de moldavos con derecho al voto, a las 2.150 mesas de votación, incluidas 150 en el extranjero, acudieron más de 1.474.000, un 48,36 % del padrón electoral, una participación ligeramente menor que la de las anteriores parlamentarias, en las que participó el 49,07 % del padrón electoral.
EL PAÍS QUE QUEREMEMOS PARA NUESTROS HIJOS
El líder del partido populista Shor, la tercera fuerza más votada, Ilan Shor, publicó un mensaje en Facebook en el que animaba a sus compatriotas a votar, sin especificar si él mismo había acudido a las urnas.
"Hoy todos juntos votamos por el país en el que queremos vivir y queremos dejar a nuestros hijos", afirmó, al señalar que el voto será también a favor de "una buena infraestructura, autopistas modernas y jardines de la infancia, por una economía fuerte, (...) un buen sistema de sanidad, fábricas y nuevos puestos de trabajo".
Además, hizo un guiño a los moldavos que viven en el extranjero, al afirmar que "votamos por nuestros compatriotas que deben volver a casa".
El paradero de Shor, actualmente perseguido por un presunto desfalco millonario al Banco de Moldavia, es desconocido, aunque la policía moldava supone que radique en Israel.
SIN VIOLACIONES SIGNIFICATIVAS
Aunque la Comisón Electoral Central afirmó que la jornada transcurrió en paz y sin violaciones significativas, los observadores moldavos de Promo-Lex constataron varios intentos de compra de votos, según declaró el jefe de la misión Nicolae Panfil.
"Se observaron 10 casos de intento de compra de votos. También 20 casos de transporte organizado de ciudadanos a los colegios, la mayoría en la ribera izquierda del Dniéster", afirmó en rueda de prensa.
En general, observó, la misión fue informada de al menos 340 "episodios sospechosos", la mayoría de los cuales estuvo vinculada a la violación del secreto de votación, en particular, tomar fotos de los boletines, cabinas de votación mal equipadas, o presencia de más de una persona en la cabina.
Vlad Batrincea, secretario del Partido Socialista Moldavo, ya alertó que su formación tomará nota de todas las violaciones detectadas y las estudiará, por lo que llamó a esperar los resultados definitivos y aseguró que este lunes volverían "con declaraciones".