Los conciertos, que iban a tener lugar esta noche y mañana jueves, han sido aplazados a una fecha por definir, según acordaron La Scala y la Ópera Estatal de Berlín, de la que es director musical desde 1992.
La razón es "la sospecha" de un caso de coronavirus en la orquesta berlinesa, por lo que se ha preferido optar por la cautela y aplazar los conciertos para realizar los controles pertinentes.
Entretanto Barenboim ofrecerá un recital al piano mañana con las últimas tres sonatas de Ludwig van Beethoven.
La Scala, templo de la lírica mundial, ofrece todo su aforo en sus espectáculos desde el pasado 9 de octubre, cuando expiraron las limitaciones impuestas durante la pandemia, aunque es preciso entrar con mascarilla y pasaporte sanitario.
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Y aspira a celebrar con público su emblemática Prima, la apertura de la temporada operística, que como cada año tiene lugar el 7 de diciembre, día de San Ambrosio, patrón de Milán, una de las fechas más reseñables del calendario cultural italiano.
El año pasado tuvo que renunciar a la Prima por la pandemia, algo que no ocurría desde la Segunda Guerra Mundial, cuando La Scala quedó reducida a escombros por los bombardeos.
Este año la obra que inaugurará la prestigiosa temporada lírica milanesa será "Macbeth" de Giuseppe Verdi, protagonizada por dos viejos conocidos de la institución, el barítono Luca Salsi y la soprano Anna Netrebko.