"La política alemana no puede quedarse al margen de la política europea, sino que tiene que sentirse responsable para el progreso de Europa", dijo Scholz en una rueda de prensa tras reunirse con la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen.
Ambos ya trabajaron juntos bajo el mandato de la excanciller Angela Merkel, a la que Scholz ha relevado ahora al frente de la principal potencia económica de la Unión Europea, pero de la que continúa haciendo gala de cierto continuismo.
El líder socialdemócrata subrayó que el europeísmo de su país se observa también en la oposición alemana, liderada ahora por los cristianodemócratas de la CDU, y aseguró que "hay que olvidar dónde estamos en el espectro político".
"Tenemos que tratar de desarrollar un futuro común en Europa", dijo Scholz, que volverá a Bruselas la próxima semana para participar en las cumbres de la Asociación Oriental y la europea a Veintisiete, su primera al frente de Alemania, donde gobierna al frente de una coalición junto con verdes y liberales.
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PRIORIDADES
Entre las prioridades a las que se enfrenta la UE, el canciller alemán citó a la pandemia y la necesidad "de hacer atractiva para todos" la vacunación contra la COVID-19.
También destacó la importancia de la "modernización de la industria" para alcanzar la neutralidad climática, que Berlín se ha marcado para el año 2045, cinco antes que la meta pactada en la UE.
En este punto, no obstante, se distanció de su homólogo francés, Emmanuel Macron, ya que Scholz apuesta por las energías renovables, como la solar y la eólica y, París, por impulsar la nuclear.
"Cada país desarrolla su propia perspectiva para luchar contra el cambio climático. Lo que nos une es que somos conscientes de nuestra responsabilidad y que tenemos una política ambiciosa al respecto", indicó el canciller en su comparecencia junto a Macron.
RUSIA
Scholz y Macron coincidieron en la necesidad de garantizar la inviolabilidad de la frontera de Ucrania ante la amenaza de una invasión rusa, una cuestión que discutió también en la sede de la OTAN con el secretario general de la Alianza, Jens Stoltenberg.
En el cuartel general aliado, el canciller abogó por intentar continuar las negociaciones en el llamado "formato de Normandía", en el que Ucrania, Rusia, Francia y Alemania tratan de encontrar una salida a la crisis en el este de Ucrania, controlado por separatistas profusos.
Más allá del reto que plantea Rusia en Europa, el canciller alemán subrayó que "en el mundo en el que vivimos, una Europa fuerte y soberana es muy importante", porque "ya no será bipolar como algunos especulan" y apunto que aunque la UE defienden la democracia y el estado de derecho "no todos" los hacen.
"Cuando actuemos en este mundo, tendremos que tener también buena relación con esos países que aun no han decidido ir en esa dirección. Depende de ellos, evidentemente, elegir su camino, pero todos tenemos que garantizar que podamos vivir en paz y no será fácil", dijo Scholz.
En la OTAN, además, Scholz manifestó el compromiso de su país con la organización transatlántica, en la que tiene un papel destacado en misiones como el batallón multinacional que lidera en Lituania contra cualquier amenaza del este.
"Hemos sido capaces de equipar a las fuerzas armadas de una forma que nunca hemos visto antes y continuaremos haciéndolo, bajo los límites fijados por nuestro presupuesto”, apuntó, en respuesta a una pregunta sobre el compromiso de los aliados de gastar el 2 % de su PIB en defensa para 2024, del que Alemania todavía está lejos.
