Chile vota hoy en segunda vuelta para elegir a un nuevo presidente

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Los presidenciables chilenos Gabriel Boric (i) y José Antonio Kast. (EFE)
Los presidenciables chilenos Gabriel Boric (i) y José Antonio Kast. (EFE)ELVIS GONZALEZ/ POOL

Chile vota hoy para elegir a su próximo presidente, que relevará a Sebastián Piñera, en uno de los comicios más trascendentales de su historia. Disputan la presidencia José Kast (conservador) y Gabriel Boric (izquierdista)

SANTIAGO DE CHILE (EFE). Al balotaje de hoy llegan José Antonio Kast y Gabriel Boric empatados en intención de votos, según las últimas encuestas.

En las calles, en el transporte público o en las terrazas de un veraniego Chile no se habla de otra cosa que no sea esta votación, que según los expertos es las más determinante para el futuro del país desde el plebiscito de 1988 que sacó a Augusto Pinochet del poder.

Más de 15 millones de personas están llamadas a acudir hoy a alguno de los 2.500 locales de votación, que se encuentran custodiados por más de 20.000 efectivos de las fuerzas se seguridad, según explicó el ministro del Interior, Rodrigo Delgado.

Evitar el abstencionismo

Según los expertos el panorama es muy incierto teniendo en cuenta el estrecho margen entre los dos candidatos en primera vuelta.

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A esto se suma que la participación de la última votación fue tan solo del 47% y que según los últimos pronósticos, difundidos el pasado 4 de diciembre –último día en que la ley permite publicar sondeos–, hay un gran porcentaje de indecisos.

El que fue durante décadas el país más estable de Latinoamérica deberá elegir entre dos candidatos que traen bajo el brazo propuestas antagónicas frente a los grandes bloques de centro-derecha y centro-izquierda que se repartieron el poder desde el retorno a la democracia en 1990.

Desafíos

El próximo presidente, que tomará posesión en marzo de 2022 por un período de 4 años, deberá coser las heridas que dejó la crisis social de 2019, una ola de masivas protestas por la igualdad que dejaron una treintena de muertos y pusieron en jaque al Gobierno actual y a las fuerzas de seguridad.

También liderará la implementación de las normas de la nueva Constitución que comenzó a redactarse este año y que podría entrar en vigor en 2022 en caso de aprobarse en un plebiscito de salida.

Otra de los retos más urgentes del próximo gobernante será el de atender las necesidades de una clase trabajadora apurada económicamente tras la pandemia y a la que se le terminan este año las ayudas sociales, además de encarar una inflación no vista en décadas.