Cuando quedan seis días para las elecciones, Ferdinand Marcos Jr., conocido como "Bongbong" y de 64 años, obtendría el 56 por ciento de los votos según la encuesta publicada el lunes por Pulse Asia, mientras que su más inmediata contrincante, Leni Robredo, se quedaría en el 23 por ciento pese a haber aglutinado la oposición a la dinastía Marcos.
El hijo del fallecido dictador forma tándem político con Sara Duterte, la hija del actual presidente de Filipinas, que se presenta a la vicepresidencia del país en una votación independiente en la que también lidera las encuestas con amplio margen.
La larga campaña electoral que comenzó el pasado febrero , se intensifica esta semana y los candidatos favoritos, Marcos y Duterte, celebran este martes un mitin en la ciudad de Iloilo, en el que esperan congregar hasta 100.000 personas para dar una demostración de fuerza en la recta final de los comicios.
Marcos Jr, que no puede entrar en Estados Unidos por una condena asociada a delitos financieros de su padre, ha defendido las políticas económicas y sociales de Duterte, pero se muestra más moderado en los aspectos más polémicos del actual presidente, como la sangrienta “guerra contra las drogas”, en las que unas 30.000 personas han muerto en redadas policiales según Human Rights Watch.
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De momento, a pesar de la cercanía de las votaciones, Duterte aún no ha dado su apoyo oficial a ningún candidato, un movimiento que podría llegar en los próximos días y que movilizaría a numerosos votantes debido a la gran popularidad con la que termina su mandato, según los expertos.
POLARIZACIÓN ELECTORAL
Los comicios, en los que se elige al jefe de Estado por un mandato único de seis años, están dominados por candidaturas personalistas que carecen de identidad ideológica; la campaña electoral ha estado marcada por la polarización que los Marcos generan en la opinión pública, pero el sentir general de una mayoría consistente en la calle es favorable a la vuelta de la dinastía Marcos al poder.
Mientras tanto, la campaña de la actual vicepresidenta Leni Robredo, la única mujer entre los aspirantes, se ha centrado en aunar el voto progresista, con miles de jóvenes voluntarios adhiriéndose a la candidatura, y mítines muy coloridos en los que se defiende “la limpieza” de su historial como dirigente y la lucha contra la corrupción que abunda entre la clase política.
El proceso electoral ha estado empañado por una intensa campaña de desinformación, con acusaciones constantes entre los candidatos presidenciales de manipular la narrativa política e histórica a través de las redes sociales, con una población muy joven y vulnerable a la manipulación y los bulos – los filipinos lideran la clasificación mundial de uso diario de las redes sociales.
El equipo propagandístico de Bongbong Marcos, que cayó derrotado en la carrera por la vicepresidencia en los anteriores comicios (2016) precisamente frente a Leni Robredo, parece haber convencido a una mayoría de las bonanzas de la dictadura conyugal de Ferdinand e Imelda, que huyeron de Filipinas en 1986 derrocados en una revolución pacífica, dejando al país hundido en una profunda crisis económica y tras haber saqueado entre 5.000 y 10.000 millones de dólares de las arcas públicas.
OTROS CANDIDATOS
Entre los diez candidatos a la presidencia, destacan además la estrella del boxeo - campeón mundial en ocho divisiones - Manny Pacquiao o el conocido actor y actual alcalde de Manila, Isko Moreno, tercero y cuarto en las encuestas, respectivamente.
En los comicios también se elegirá los de la cámara baja, el Congreso, además de escoger a doce de los 24 senadores en la cámara alta por un mandato de tres años, en unas votaciones en las que también se decide a los representantes locales y provinciales.
Las elecciones del próximo lunes llegan después de que el 11 de abril comenzaran a votar en los respectivos consulados los cerca de dos millones de filipinos que viven fuera del país y tienen derecho a voto- de un total de 67 millones de votantes registrados-, una diáspora que influyó en la victoria de Rodrigo Duterte en los anteriores comicios celebrados en 2016.
El presidente electo será investido oficialmente el próximo 30 de junio.
