En un contacto con los medios, la viceministra de Comunicación, Gabriela Alcón, declaró que Arce “va a mantener su posición” y no asistirá al evento hemisférico “en tanto exista una política de exclusión” sobre las naciones mencionadas.
La funcionaria consideró que "se golpea la institucionalidad de la misma Cumbre de las Américas cuando se va excluyendo países" y que, por el contrario, es necesario "escuchar" y "ser integradores".
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Entre los países que también descartaron o han condicionado su asistencia al evento que se desarrollará del 6 al 10 de junio en la ciudad estadounidense de Los Ángeles están México, Guatemala y Honduras.
La viceministra boliviana confirmó que a pesar de haber recibido la invitación la postura de Bolivia está definida, y que Arce "no va a participar si continúa esa política".
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No obstante, no está descartada la posibilidad de que una delegación boliviana se presenté al encuentro, aunque Alcón precisó que aquello es algo que está sujeto a una decisión de la Cancillería boliviana.
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El mandatario de Bolivia ya había confirmado esa postura la pasada semana cuando asistió a una cumbre de los países que conforman la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) en La Habana, de la que forman parte los países excluidos.
Para Arce, la decisión de no tomar en cuenta a Cuba, Nicaragua y Venezuela se debe a una “decisión arbitraria de Estados Unidos” se debe a una “excusa” y que aquello solo debilita al foro regional.