"Si esos dos grandes países no cooperan, los problemas más graves de la humanidad no tienen solución", señaló Borrell en una entrevista con Efe en Santander, donde está toda esta semana con motivo del curso "Quo vadis Europa", dirigido por el propio Borrell y que este año cumple su décimo aniversario dentro de la programación de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo.
El jefe de la diplomacia comunitaria instó a "hacer todo lo posible para disminuir las tensiones en una zona del mundo que es, junto con la frontera rusa, la más peligrosa", y apuntó a que estos dos grandes poderes globales, que suman juntos casi la mitad del PIB mundial, deben cooperar para resolver problemas como el cambio climático.
Según Borrell, Europa -que considera a China "socio, competidor y rival sistémico" de forma paralela- y el resto del mundo necesitan que Pekín y Washington trabajen juntas y, aunque ve "razones para una confrontación", aseguró que la interdependencia económica de las dos potencias hace ahora que "ninguno tenga interés en la ruina del otro".
"Entre Rusia y Estados Unidos en la Guerra Fría no había prácticamente relaciones comerciales, interdependencia económica o relaciones financieras. Hoy China es el gran banquero de Estados Unidos. China tiene un trillón de dólares de deuda pública americana. Los intercambios comerciales entre ellos son de dos billones de dólares al día", recordó el exministro español.
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La visita a Taiwán a principios de agosto de la presidenta de la Cámara de Representantes de EE.UU., Nancy Pelosi, ha irritado profundamente al Gobierno chino, que ha respondió con sanciones económicas y con el anuncio de maniobras militares en las aguas que rodean la isla.
"No es la primera vez que hay parlamentarios de visita en Taiwán. En política internacional hay que reconocer y practicar el derecho a viajar y los parlamentarios tienen también la tarea de lo que se llama diplomacia parlamentaria. Pero también hay que juzgar la oportunidad de las cosas", dijo Borrell, que señaló que visitar Taiwán "no está en su agenda" ahora.
"Hay que disminuir las tensiones y que la solución, una vez más, se busque por procedimientos pacíficos", apuntó.
Borrell previó también que la interdependencia entre ambos pueda disminuir por el enfriamiento de las relaciones políticas entre ambas capitales, pero insistió en que "hoy por hoy" sigue siendo grande, por lo que consideró "peligroso y lamentable" que después de la visita de Pelosi a Taiwán, China haya abandonado el diálogo climático con Estados Unidos.
"Eso es una muy mala noticia para el mundo", advirtió Borrell.
