Dichos rezos, conocidos en Nicaragua simplemente como ""Purísima"", iniciaron oficialmente hoy a las 12.00 hora local (18.00 GMT) cuando algunos católicos espontáneos lanzaron petardos al aire y en algunas viviendas se escuchó el tradicional grito "¡¿Quién causa tanta alegría?!", con la respuesta "¡La Concepción de María!".
La Arquidiócesis de Managua, dirigida por el cardenal Leopoldo Brenes, recomendó dedicar los rezos a la Iglesia católica y a las familias, a través de su cuenta en Facebook, uno de los canales que utiliza la religión católica para informar a sus fieles en Nicaragua.
"Día Primero: Ofrezcamos este novenario por nuestra Iglesia y familia nicaragüense para que seamos fieles a la fe cristiana y el amor mariano que llevamos en el ADN", señaló la Arquidiócesis.
La particularidad de la "Purísima" es que los rezos se hacen por invitación frente a un altar de la Virgen Concepción de María, instalado por el dueño de la casa en que se celebran, se combinan plegarias con cantos religiosos exclusivos de la temporada, y al final los invitados reciben regalías, que generalmente son dulces tradicionales y alimentos.
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Hay católicos que se dedican a ahorrar durante un año para ser anfitriones de una "Purísima", cuyos rezos van del 28 de noviembre al 7 de diciembre.
La tradicional "Purísima", además, destaca porque sus rezos superan las barreras de las religiones, ya que, contrario a los otros rezos de la fe romana, estos atraen a católicos y no católicos.
Incluso las empresas suelen apartar tiempo al final de la jornada, durante un lapso de nueve días, para que sus empleados celebren la "Purísima" cantándole a una réplica de la virgen en su altar.
En algunas alcaldías de Nicaragua también se promueven los rezos a la "Purísima".
"Hoy 28 de noviembre iniciamos novenario a la Inmaculada Concepción de María, "La Purísima". Encomendemos a ella nuestra sufrida Nicaragua", escribió el sacerdote nicaragüense y exiliado Edwing Román.
Los rezos tradicionales concluirán el 7 de diciembre próximo, con una de las celebraciones religiosas más grandes de Nicaragua, la "Gritería", similar a la "Purísima", pero con las puertas de los anfitriones abiertas y en la que los nicaragüenses participan de forma masiva.
Con un 58,5 % de los 6,6 millones de nicaragüenses, la religión católica es la más seguida en Nicaragua, según datos oficiales.