La invasión rusa "es un ataque al orden de paz que nos hemos dado, al que pertenece el acuerdo de que las fronteras no se desplazan por la fuerza", dijo en una entrevista con la cadena pública ZDF que giró en torno al conflicto en Ucrania.
"Si a todos les da por leer ahora libros de historia y sacar sus conclusiones sobre cómo les gustaría que fueran sus fronteras nos esperaría un largo periodo de guerra", añadió el canciller, que parte mañana en un viaje a la India.
El canciller señaló que, para muchos países de África, Asia o Sudamérica, Ucrania queda muy lejos, pero aún así se ven afectados por las consecuencias en el ámbito energético o alimentario.
Con estos estados es preciso interactuar "como iguales", reiteró Scholz, que recordó que, aunque algunos de ellos se abstuvieran en la Asamblea General de la ONU con respecto a la guerra de Ucrania, también han manifestado que la invasión "no está justificada".
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También en relación a China, el canciller señaló que ante el resurgimiento del continente asiático, al que pertenecen también países como Indonesia y la India, "tendremos que entendernos y, por eso, hay que insistir en unas reglas conjuntas".
Este orden, sin embargo, no puede ser impuesto desde Occidente, en un mundo que será cada vez más multipolar, de acuerdo con Scholz.
"No podemos hacer como si hubiéramos dejado atrás los tiempos del colonialismo y ahora empezar a decir a estos países lo que tienen que hacer", remachó, dejando claro que es preciso renunciar a la "arrogancia".
Un estudio publicado esta semana por el Consejo Europeo de Relaciones Exteriores (CFR), un 'think tank' con sede en Berlín, reveló la brecha existente entre la opinión pública occidental y la del resto del globo con respecto a la guerra de Ucrania.
Mientras que en Europa y Estados Unidos la mayor parte de los encuestados piensan que Ucrania debe ganar la guerra y recuperar su territorio, en países como China, India o Turquía predomina la visión de que es preferible que se firme la paz lo antes posible, incluso cuando ello implique concesiones a Moscú.
Durante la entrevista de hoy, Scholz recalcó una vez más que sólo le corresponde a Kiev decidir cuándo está lista para emprender negociaciones con Moscú y que la guerra sólo podrá terminar cuando el Kremlin renuncie a imponer sus objetivos en Ucrania.