Breton, que participó en el Mercado Europeo del Cine que se celebra coincidiendo con el Festival de Cannes en esa ciudad de la Costa Azul francesa, presentó un informe sobre las perspectivas europeas en el sector de los medios en el que se constata la predominancia de plataformas sobre todo estadounidenses.
Refiriéndose a la actividad audiovisual, señaló que la tendencia constatada es "desgraciadamente la disminución de los actores europeos en la conservación y explotación de lo que considero uno de los grandes activos, que es la propiedad intelectual".
Explicó que mientras las emisiones de radio y televisión públicas concentran un tercio del tiempo que los europeos pasan delante de las pantallas, los consumidores cada vez recurren más a los vídeos a la demanda, y que allí un 70 % del mercado está controlado por tres grandes plataformas, "ninguna europea".
El comisario añadió que cada vez hay más casos en los que los derechos de propiedad intelectual de obras audiovisuales europeas son compradas por esas plataformas.
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Una cuestión, a su parecer, "bastante problemática" que debería generar una reacción porque "la gestión de los derechos de propiedad intelectual es crucial para las perspectivas de crecimiento".
Breton insistió en que "por supuesto Europa está abierta a los inversores y a las compañías no europeas, en particular en el sector cultural" y está en favor de la divulgación de las ideas.
Pero, al mismo tiempo, "tenemos que ver cómo podemos evolucionar en este contexto, proteger nuestro territorio europeo como un gran actor".
El responsable del Mercado Interior recordó algunos de los dispositivos puestos en marcha por la Comisión Europea, empezando por el programa MEDIA para la industria audiovisual con un presupuesto de 4.000 millones de euros desde el comienzo de su mandato.
A ese respecto, señaló que 14 de las películas presentadas en el Festival de Cannes están apoyadas por ese programa, de las cuales 9 en la competición oficial y cuatro compitiendo por premios.
El comisario europeo también envió un mensaje en dirección de la industria europea de contenidos al hacer notar "la gran capacidad de actores no europeos para adaptarse muy rápidamente a los cambios en el sector" a la hora de "desarrollar nuevos modelos comerciales" y finalmente dictar las tendencias.
"Esto -añadió- debería incitarnos a asumir nuestra parte y hacer lo que nos corresponde".
Breton subrayó la importancia de la adaptación a las nuevas tecnologías y para justificarlo se refirió a la implosión en los últimos tiempos de la inteligencia artificial generativa, en cuya mesura están trabajando sus servicios.
También a la realidad aumentada, que es un sector de fuerte crecimiento en el que diez compañías ocupan una cuota de mercado europeo del 80 % y ninguna es europea.
Para hacer frente a esa situación de desventaja, se ha creado una "coalición industrial" de realidad virtual y realidad aumentada con la idea de coordinar los esfuerzos para tener "una visión estratégica".
La Comisión Europea calcula en su informe que ese negocio pasará a representar hasta 800.000 millones de euros para finales de esta década.