El volumen de ventas del cuarto mes de 2023, en tanto, subió un escaso 0,1 % comparado con marzo último, de acuerdo con los datos del Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE).
En los doce meses terminados en marzo, el incremento interanual acumulado en las ventas se situó en un promedio del 0,9 %, mientras que en lo que va del año llegó hasta abril en un 1,9 %.
De las ocho grandes actividades analizadas por el instituto, la de combustibles y lubrificantes automotores presentó la mayor variación en el mes, con un salto del 8,7 % comparado con abril de 2022.
En el lado opuesto, el sector de artículos de uso personal y doméstico registró una contracción en abril del 18 % frente al mismo mes del año pasado.
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Otra de las actividades con resultado positivo fue la de supermercados, alimentos, bebidas y cigarrillos, que en el cuarto mes de este año aumentó un 3,1 en comparación con abril de 2022 impulsada por las ventas de la Pascua.
"Antes de la pandemia los resultados de las ventas de Pascua aparecían sólo en abril. En los años de la pandemia esas ventas se diluían desde enero y ahora volvimos al estándar de antes", comentó el gerente del estudio, Cristiano Santos, citado en un comunicado.
El comercio minorista es uno de los pilares que mueve el consumo doméstico, fundamental para el crecimiento de la economía de Brasil, que este año se prevé que experimente un fuerte frenazo y se expanda menos de un 1 %, según las proyecciones del mercado financiero.
Las ventas del comercio brasileño aumentaron un 1,0 % en 2022, pero un resultado inferior al 1,4 % que se había obtenido en 2021 y el menor para un año desde 2017.