En un comunicado publicado a última hora del viernes, el Ministerio Público explicó que desde hace un tiempo Sonko ha realizado actos, declaraciones, escritos, imágenes y maniobras con "graves consecuencias para el orden público y la integridad de las personas y bienes", elementos que "constituyen actos penalmente reprobables".
El documento fue publicado después de que la Gendarmería de Senegal detuviera a Sonko tras un altercado con un agente de este cuerpo policial.
Según explicó Sonko en sus redes sociales, "los agentes de inteligencia que están estacionados en los alrededores de mi casa las 24 horas del día empezaron a filmarme".
"Les arrebaté su teléfono y pedí a la persona que grababa que lo desbloquease y borrase las imágenes que tomó, algo que se negó a hacer", dijo al señalar que un equipo de la Gendarmería "parece dispuesto a derribar la puerta de mi casa".
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"Pido a la población que esté preparada para hacer frente a estos interminables abusos", añadió.
Según la versión de la Fiscalía, el opositor "robó violentamente el teléfono móvil de una gendarme, cuyo vehículo se había averiado cerca de su domicilio, e inmediatamente hizo un llamamiento a la población, en un mensaje subversivo publicado en las redes sociales".
Tras su detención, la capital y algunas ciudades del país vivieron altercados entre las fuerzas policiales y jóvenes, que quemaron neumáticos y levantaron barricadas como protesta.
El pasado mes de junio, un tribunal condenó a Sonko a dos años de prisión por un delito de corrupción de la juventud (aplicable cuando se abusa de jóvenes entre 18 y 21 años, según el Código Penal senegalés), pero el opositor aún no ha sido arrestado por este motivo.
El popular opositor ha denunciado la "instrumentalización" de la justicia por parte del presidente senegalés, Macky Sall, para impedirle concurrir en los próximos comicios, previstos para 2024.
Tras conocerse la sentencia, las autoridades del país reprimieron las manifestaciones a su favor con dureza, que dejaron al menos 16 muertos, según el Ministerio del Interior senegalés, si bien la organización pro derechos humanos Amnistía Internacional (AI) documentó 23 muertes, incluidos tres menores.
Conocido por su discurso "antisistema", Sonko critica la mala gobernanza, la corrupción y el neocolonialismo francés y cuenta con muchos seguidores entre los jóvenes de Senegal.
