Fuentes de la familia remitieron a EFE una orden firmada por el juez Ambrosio N. Moleta, del tribunal de Dapa, correspondiente a donde se produjeron los hechos.
Allí Bello, un español de 32 años, murió acribillado el 8 de enero de 2020 en la turística isla de Siargao (sureste) en una operación supuestamente orquestada por los policías, que fueron acusados del asesinato del empresario por un tribunal, se entregaron ese mismo año y en marzo se declararon inocentes.
Los acusados, el capitán Vicente Panuelos y los sargentos Ronel Azarcón Pazos y Nido Boy Esmeralda, no se presentaron en su momento ante el tribunal y estuvieron desaparecidos hasta este año.
La familia solicitó en su momento el traslado del expediente a Manila, al entender que habría una mayor diligencia en la tramitación del caso.
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Ahora, a la espera de que la Corte Suprema decida sobre este extremo, el tribunal de Dapa ha decidido suspender sin fecha la vista sobre la petición de libertad bajo fianza, por lo que no entra a valorar la solicitud.
La familia espera, no obstante, que esta no se conceda, dado que los tres policías estuvieron prófugos y, además, están acusados de asesinato y falsificación de pruebas para encubrir lo ocurrido.