El hombre fue acusado de un delito de intento de coacción agravado y otro de intento de extorsión agravado, un crimen de tenencia ilegal de arma, otro de acceso indebido y otro de desvío de datos, informó hoy la Fiscalía.
Sin embargo, refirió que el acusado sufre de "perturbación esquizofrénica" y que debido a esta anomalía psíquica, en el momento de los hechos, "se encontraba en período de descompensación".
"El Ministerio Público entiende que el acusado deberá ser declarado no imputable, por anomalía psíquica grave, y sujeto a la medida de seguridad de internamiento en un establecimiento psiquiátrico", señaló.
El hombre está en prisión preventiva en el Hospital Prisional de Caxias desde el pasado enero, cuando fue detenido por sus amenazas al presidente.
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Semanas antes, le envió a su residencia oficial una carta con una bala y un teléfono móvil, en la que le pedía un millón de euros y le remitía una cuenta bancaria en la que debería ser ingresado el dinero.
Rebelo de Sousa restó entonces importancia al suceso y dijo que "es parte de la vida".