Con ese resultado, el crecimiento acumulado anual a junio de 2023 se ubicó en 3,3 %, de acuerdo con la estimación preliminar del banco emisor del Estado.
La entidad monetaria indicó que el PIB correspondiente al segundo trimestre de 2023 (abril-junio) mostró un mayor dinamismo en su evolución, al registrar un crecimiento interanual de 4 % (3,6 % en el trimestre anterior).
Para 2023, el Banco Central estima un crecimiento económico de entre 3 % y 4 %, con una inflación de entre 6 % y 7 %.
La entidad monetaria explicó que la "evolución positiva" del PIB en el segundo trimestre de 2023 se debió al crecimiento interanual en las actividades de hoteles y restaurantes (22,6 %), electricidad (16,4 %), construcción (8,8 %), intermediación financiera y servicios conexos (6,2 %), transporte y comunicaciones (4,6 %), comercio (4,4 %), entre otras actividades económicas.
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Por el enfoque del gasto, el crecimiento del PIB trimestral estuvo determinado por el impulso de la demanda interna, debido al crecimiento del consumo (4,5 %) y de la inversión (12,7 %).
"Lo anterior se vio atenuado por la disminución de la demanda externa neta, que registró disminución en las exportaciones (2,8 %) y crecimiento en las importaciones (8,2 %)", añadió.
El PIB nicaragüense aumentó el 3,8 % en 2022 con respecto a 2021, cuando la economía de Nicaragua creció el 10,3 %, siendo el segundo año consecutivo de incremento después de tres periodos de cierre con saldo en rojo, según el Banco Central.
La economía nicaragüense se había contraído en un promedio de 3,03 % anual en el periodo 2018-2020.
El PIB decreció un 2 % en 2020 debido a la pandemia de la covid-19 y los daños causados por los huracanes Eta e Iota, en noviembre de ese año, según la autoridad monetaria.
En 2019 cayó un 3,7 % y un 3,4 % en 2018 por la crisis sociopolítica que afecta al país desde hace 65 meses, de acuerdo con el emisor.