Arianespace pospone a una fecha por determinar el lanzamiento aplazado de su cohete Vega

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París, 7 oct (EFE).- El consorcio europeo Arianespace ha decidido finalmente posponer a una fecha todavía por determinar el lanzamiento de un cohete Vega, que se abortó la madrugada de este sábado en el último momento, cuando estaba preparado en la base de Kurú, en la Guayana francesa.

En un comunicado publicado este sábado, Arianespace lo justificó porque continúan "las comprobaciones de los equipos que causaron la interrupción de la cuenta atrás" la noche pasada.

La nueva fecha se definirá "en cuanto concluyan las investigaciones", añadió sin más precisiones del plazo.

Inicialmente, el consorcio europeo había dicho que estaba trabajando con la idea de que el lanzamiento se pudiera llevar a cabo en la noche del sábado al domingo, justo 24 horas después del momento para el que estaba programado en un primer momento.

La operación entonces se paralizó, según la explicación que había dado, por "una medición ligeramente por encima de su umbral máximo durante la cuenta atrás".

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En cualquier caso, Arianespace se esforzó en subrayar que tanto la lanzadera como los dos satélites de observación de la Tierra y el resto de las cargas útiles de la misión "se encuentran en condiciones estables y seguras".

Esos dos satélites son, el Theos-2, para la Agencia Tailandesa de Desarrollo de Geoinformática y de Tecnologías Espaciales (Gistda, por sus siglas en inglés) y el Formosa-7R/Triton, de la Agencia Espacial de Taiwán (TASA).

El primero, fabricado por Airbus, está concebido para ofrecer imágenes con una resolución de 50 centímetros en el suelo y complementar las informaciones que ofrece Theos-1, lanzado en 2008 también para Tailandia.

El Formosat-7R/Triton dispone de un sistema de reflectometría que le permite captar señales que se reflejan en la superficie del mar y que se utilizarán para calcular los vientos en los océanos y así ayudar a prever la intensidad y la trayectoria de los ciclones.

Además, la misión VV23 de este cohete Vega incluye igualmente una carga una decena de minisatélites, entre los que hay tres de un programa de demostración dirigido por el Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial de España (INTA) y la Comisión Europea para monitorizar las aguas interiores de la península Ibérica, y en concreto las de los embalses y pantanos.