Caroit, que representa a los franceses de América Latina y el Caribe, señaló en un comunicado la legitimidad de las demandas de los agricultores de su país, que están a punto de cumplir dos semanas de protestas, intensificadas desde ayer con bloqueos de carreteras en torno a París.
"El sistema actual, que carga el peso de la transición ecológica solamente en los productores, debe cambiar", insistió la legisladora, que pidió que los agricultores estén "en el centro del proceso".
Sin embargo, consideró "un error" el "señalar con el dedo los tratados de libre cambio, especialmente el UE-Mercosur, como los únicos responsables de todos los males de los agricultores franceses".
Por ello, pidió que la Unión Europea continúe las negociaciones con Mercosur "para lograr un acuerdo virtuoso, conforme a nuestras exigencias medioambientales y que no suponga una competencia deseal para nuestros agricultores".
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Desde su firma en 2019, los gobiernos de Francia y otros países de la UE, como Irlanda o Austria, han rechazado ratificar el texto.
Los agricultores franceses temen, si ese acuerdo entra en vigor, que se produzca una avalancha de productos agroalimentarios que no están obligados a cumplir los estándares ambientales, veterinarios y de seguridad de los europeos.
Desde que estallaron las protestas agrícolas, el presidente Emmanuel Macron y su Gobierno han insistido en su rechazo a ratificar el acuerdo con Mercosur tal como está redactado.
En cambio Caroit advirtió sobre "la importancia de las señales que Francia envía a sus socios internacionales" sobre este asunto.