"La Unrwa está tomando medidas para mejorar la gobernanza. En respuesta, hemos decidido levantar la suspensión temporal de la financiación y brindar apoyo. La situación humanitaria en Palestina es urgente y la participación de la UNRWA en la asistencia es esencial", dijo Kamikawa en una rueda de prensa hoy.
La canciller japonesa anunció también que pronto se entregará una contribución de unos 35 millones de dólares (32,6 millones de euros) que se había programado para el año fiscal de 2023, que finalizó en el país el 31 de marzo.
La decisión de Japón se produce después de que el pasado 28 de marzo Kamikawa se reuniera con Philippe Lazzarini, comisionado general de la UNRWA, para recibir explicaciones sobre los procesos de investigación y la mejora de la gobernanza en la organización, tras lo cual el país asiático hizo una valoración positiva.
Japón suspendió su ayuda a la UNRWA el pasado enero debido a los supuestos vínculos de varios de sus miembros con el grupo islamista Hamás, que también habrían sido acusados de supuestamente ayudar a organizar el ataque que desencadenó la guerra actual en Gaza.
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Al retirar la financiación, el país asiático destacó, sin embargo, el papel "esencial" de la agencia para proporcionar servicios de salud, atención médica, educación y alimentos a millones de refugiados palestinos, especialmente en la Franja de Gaza, pero reclamó a la misma "una investigación formal".
Con más de 30.000 empleados, la UNRWA es la mayor organización de Gaza al margen del Gobierno de la Franja, controlado de facto por Hamás desde 2007.