Por esa acusación, la FTC prohibió a Sheffield servir en la junta de ExxonMobil, que está finalizando el proceso de adquisición de Pioneer por 65.000 millones de dólares, una vez se cierre la operación, algo que se espera que pueda suceder mañana mismo.
De acuerdo a la FTC, Sheffield conspiró con representantes de la OPEP para reducir la producción de petróleo y gas, aumentando así las ganancias de Pioneer.
Sheffield mantuvo de manera repetida conversaciones privadas con altos representantes de la OPEP para asegurarles que tanto Pioneer como las otras petroleras de la Cuenca Pérmica de Texas estaban sosteniendo la producción artificialmente baja.
En un comunicado, Pioneer afirmó que la acusación de la FTC "es un desconocimiento fundamental de los mercados petroleros estadounidenses y mundiales y malinterpreta la naturaleza y la intención de las acciones de Sheffield".
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Según The Wall Street Journal, el regulador federal ha decidido remitir las acusaciones contra Sheffield al Departamento de Justicia.