Lejos del objetivo de conseguir 19.598 nuevos soldados, solamente 9.959 se unieron a las Fuerzas de Autodefensa niponas (Ejército) durante el anterior año fiscal, que concluyó en marzo, lo que supone el peor dato desde el establecimiento del cuerpo en 1954, según cifras aportadas este lunes por el Ministerio de Defensa.
Pese a que Japón viene aumentando su inversión en Defensa desde 2022 (el último Libro Blanco, de julio de 2023, fijaba el gasto para los siguientes cinco años en 43 billones de yenes o 301.000 millones de dólares), dado el contexto de tensiones en la región, protagonizadas principalmente por los países vecinos Corea del Norte, China y Rusia, sufre déficit de contratación en el Ejército.
La falta de mano de obra, derivada del envejecimiento de la población y de la baja tasa de natalidad, es un problema generalizado en el país y lleva a los distintos sectores a intensificar sus esfuerzos por atraer talento, carrera a la que se suman también ahora las Fuerzas de Autodefensa, que compiten por reclutar a jóvenes a los que también quiere el sector privado.
El Ministerio de Defensa creó una comisión para atajar este problema y plantea superarla mediante mejoras salariales y de las condiciones laborales, el uso de inteligencia artificial para aumentar la eficiencia, y la incorporación de miembros del servicio retirados, según detalles recogidos por la agencia de noticias Kyodo.
Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy
Se prevé que Defensa publique un informe sobre la escasez de personal a finales del mes de agosto y que, con base en él, solicite presupuestos de contratación para el año fiscal 2025.
