Borrell, a través de un mensaje en la red social X, afirmó que comparte las preocupaciones del ministro jordano de Exteriores, Ayman Safadi, “sobre las repetidas violaciones del ‘statu quo’ de los Lugares Santos”.
Aseguró que se encuentran “bajo amenaza continua, incluso por parte del ministro (israelí de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir”.
Consideró que se trata de una preocupación “totalmente legítima” y que debe ser abordada por la comunidad internacional.
“La estabilidad regional está en juego”, concluyó.
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Ben Gvir sugirió el martes la construcción de una sinagoga en la Explanada de las Mezquitas de Jerusalén, propuesta rechazada por los países islámicos, que han advertido de que la entrada y el rezo de los judíos en ese área alimenta el conflicto religioso y el extremismo.
No obstante, este ministro extremista antiárabe volvió a defender el lunes, el derecho de los judíos a rezar en la Explanada de las Mezquitas de Jerusalén, o Monte del Templo, donde está la mezquita al Aqsa y el Domo de la Roca, así como la construcción ahí de una sinagoga.
Se trata del tercer lugar más sagrado para los más de 1.300 millones de musulmanes del mundo, tras los de La Meca y Medina, en Arabia Saudí.
Según el 'statu quo' vigente desde la ocupación por Israel de Jerusalén Este, la Explanada de las Mezquitas está reservada al culto de musulmanes, si bien el lugar está abierto durante determinadas horas del día para visitas de personas no musulmanas, incluidos los judíos.
Sin embargo, el lugar es también sagrado para los judíos que afirman que en su interior había dos templos judíos desde hace ya más de un milenio.
Borrell ya había criticado anteriormente declaraciones de Ben Gvir sobre cortar el flujo de ayuda a los palestinos y también del ministro israelí de Finanzas, el colono Bezalel Smotrich, que vio justificado dejar morir de inanición a dos millones de palestinos.
Consideró entonces que comentarios así incitan a crímenes de guerra y afirmó que la UE debe abordar la posibilidad de imponer sanciones.