En un comunicado enviado a la prensa, Gnyot expresa su agradecimiento a todas las personas que lo apoyaron y "lucharon" por su vida, entre ellos sus abogados, amigos y familiares, así como organizaciones de protección de los derechos humanos y periodistas.
Gnyot prometió que comparecerá en una rueda de prensa en los próximos días.
No especificó ni la fecha ni el lugar de esa comparecencia, limitándose a señalar que la hará después de acostumbrarse "a la libertad y la seguridad".
Gnyot fue detenido a su llegada al aeropuerto de Belgrado desde Tailandia en octubre de 2023. Había viajado a la capital serbia para filmar un comercial.
A la espera de un juicio sobre su extradición, permaneció siete meses en la cárcel, hasta junio, cuando pasó a arresto domiciliario.
El pasado 31 de mayo, el Tribunal Superior de Belgrado aprobó la extradición de Gnyot, quien recurrió la decisión judicial, tras lo cual la Corte de Apelaciones de Belgrado devolvió el caso al tribunal para una nueva consideración.
El 30 de octubre se cumplió un año de detención, el plazo máximo que por ley las autoridades pueden mantener a alguien detenido mientras consideran si lo van a extraditar, por lo que el tribunal decidió ponerlo en libertad, explica Radio Free Europe.
Numerosas organizaciones de derechos humanos habían pedido a las autoridades de Serbia a que no extraditen a Gnyot a Bielorrusia, que lo busca por supuesta evasión fiscal.
Consideran que la acusación es una excusa y que en realidad está perseguido políticamente, y temían que afrontaría torturas e incluso la posibilidad de la pena de muerte si era devuelto a su país.