La futura ley, que ayer fue aprobada en el Senado y se espera que entre en vigor en noviembre de 2025, establece multas de hasta unos 2,1 millones de dólares (30,5 millones de euros) a las plataformas digitales como TikTok, Facebook o X que no establezcan medidas para prohibir el acceso a los menores de 16 años.
"No sostenemos que su aplicación vaya a ser perfecta, del mismo modo que la prohibición del alcohol a los menores de 18 años no significa que nunca tengan acceso a él. Pero sabemos que es lo correcto", dijo Albanese en una rueda de prensa en Camberra, al confiar en que con ella ayudará a los padres a proteger la salud mental de los menores y motivará a los menores a hacer más deporte.
"Las plataformas tienen ahora la responsabilidad social de garantizar que la seguridad de nuestros hijos sea una prioridad para ellas", precisó el mandatario laborista, impulsor de esta ley que impone una de las restricciones más estrictas al acceso a las redes sociales de los países democráticos.
Esta ley, que no contempla excepciones por consentimiento parental, fue aprobada anoche en el Senado con 34 votos a favor y 19 en contra, con apoyo de parte de la oposición, un día después de ser aprobada en la Cámara de Representantes por 101-13.
Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy
Hoy, los diputados aprobaron las enmiendas del texto, con lo que solo falta el visto bueno protocolar de la gobernadora general de Australia, Sam Mostyn, para que se convierta en ley.
La ley, cuyas normativas serán publicadas por la Comisión de Seguridad en Línea de Australia, obligará a plataformas digitales como Facebook, Instagram, X, TikTok o Snapchat, a tomar "medidas razonables" para controlar el acceso a los menores de 16 años, so pena de millonarias multas.
Sin embargo, excluye a otras plataformas consideradas de "bajo riesgo", como podría ser YouTube o los juegos en línea.
La ley, que fue presentada al Parlamento el 21 de noviembre, ha sido criticada por políticos, expertos, onegués y plataformas digitales por no haberse debatido lo suficiente o porque atenta potencialmente contra los derechos humanos de los menores y afecta a adolescentes vulnerables, como los miembros de la comunidad LGTBIQ+, que usan las redes sociales en busca de apoyo.
Con esta ley, Australia se suma a la de países como España, que fijó la edad mínima para abrirse una cuenta redes sociales primero en 14 y está en proceso de subirla a 16, y otros lugares del mundo como Puerto Rico y Nueva York que han adoptado medidas similares.
