Según el borrador al que tuvo acceso EFE de la propuesta egipcia, que se prevé que sea ratificada este martes en la cumbre extraordinaria de líderes de la Liga Árabe que tiene lugar en Egipto, el plan cuenta con una fase de "recuperación temprana" de seis meses con un coste de 3.000 millones de dólares.
Esto irá seguido de una primera fase de dos años, que tendrá un coste de 20.000 millones de dólares, y que prevé habilitar siete zonas no especificadas dentro de la Franja de Gaza para acoger a más de 1,5 millones de personas de forma temporal hasta que terminen los trabajos de reconstrucción.
Según un informe reciente de la ONU, el Banco Mundial y la Unión Europea, la reconstrucción de Gaza podría ascender a 53.000 millones de dólares.
El borrador, además, "insta a la comunidad internacional y a las instituciones financieras a brindar apoyo rápido al plan egipcio", al que todavía no se le han asignado los costes de una segunda fase del proyecto.
Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy
Durante este proceso, un 'comité de administración de Gaza' que está siendo formado se encargará de gestionar los asuntos del devastado enclave durante un periodo de seis meses, y estará compuesto por "tecnócratas" no afiliados a ninguna facción "que trabajarán bajo el paraguas del Gobierno palestino".
"El 'comité de administración de Gaza' está siendo formado en la fase actual en preparación para el retorno total a la Franja y gestionar la siguiente fase por decisión palestina", reza el borrador.
Además, estipula que Egipto y Jordania capaciten al "personal policial palestino en preparación para su despliegue en la Franja de Gaza", mientras que insta al Consejo de Seguridad de la ONU a que "estudie la idea de establecer una presencia internacional en los territorios palestinos de Gaza y Cisjordania".
Con este plan, Egipto también hace hincapié en que "todos los esfuerzos se dirijan a la implementación de la solución de los dos Estados y al establecimiento de un Estado palestino".
La celebración de esta cumbre de emergencia se produce en un momento en el que los países árabes buscan dar una imagen de unidad frente a los planes del presidente estadounidense, Donald Trump, de expulsar a la población de la Franja para convertir el enclave en la 'Riviera de Oriente Medio'.