"La actividad económica interna se mantuvo en junio, impulsada por el dinamismo del sector servicios, un consumo rural sostenido y una mejora gradual de la actividad urbana", señaló el RBI en el informe.
Según el RBI, los datos de inflación reflejan "una de las cifras más bajas" desde que se introdujo el actual método de medición del índice de precios de consumo (IPC).
Entre los factores que han sostenido la actividad económica, el RBI subrayó el papel del gasto público. El adelanto de las inversiones del Gobierno central y de los estados contribuyó a contrarrestar la desaceleración observada en la inversión privada, especialmente en el sector de infraestructuras.
En el frente externo, el déficit comercial se redujo tanto en bienes energéticos como no energéticos, lo que alivió las presiones sobre la balanza de pagos.
Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy
El sistema financiero, por su parte, mantuvo un superávit de liquidez, lo que permitió al banco central aplicar su política monetaria con eficacia.
El banco central destacó también que el país conserva unas reservas internacionales amplias y un nivel de deuda externa moderado en relación con su producto interior bruto, lo que refuerza su estabilidad macroeconómica frente a posibles perturbaciones externas.
El documento también atribuye parte de la fortaleza económica a la evolución favorable del monzón, cuyas lluvias llegaron en los plazos esperados y permitieron una buena siembra de cultivos de temporada.
En relación con los compromisos ambientales del país, el RBI recordó que una infraestructura verde y sostenible es clave para asegurar un crecimiento resiliente y equitativo y reiteró la importancia de canalizar inversiones hacia sectores compatibles con los objetivos de descarbonización.
El informe concluyó que, a pesar de la volatilidad del contexto internacional, la economía india se mantiene "en gran medida resiliente, respaldada por sólidos fundamentos macroeconómicos".
