"Estos son días para unirnos en clamor universal por la paz y desde nuestros hogares, familias y comunidades pedir a Dios, con todo nuestro corazón, que cese el odio, que cese la avaricia, la codicia y el afán de dominio, y que se apliquen las enseñanzas de todos los profetas y del Pastor de Pastores, nuestro Cristo Jesús, que vive y reina por los siglos de los siglos", escribieron Ortega y Murillo en el mensaje.
Ortega, de 80 años y el hombre que ha ostentado más tiempo el poder en Nicaragua, con 30 años, gobierna con más poder que nunca junto a Murillo, consolidando a través de reformas constitucionales y la fuerza su modelo de gobierno con mano de hierro, sin contrapesos y con una oposición diezmada por el despojo de sus nacionalidades y sus bienes, el encarcelamiento y el exilio.
En su mensaje, titulado "Hermandad, paz, unidad desde Nicaragua al mundo", y dirigido a las familias, Ortega y Murillo indicaron que "estos son días para celebrar el Gran Poder de Dios y el amor que nos da cada día a través de la vida que debemos hacer buena, con sabiduría, serenidad y pleno conocimiento de nuestra misión en este plano de existencia".
"Estos son días para nacer y renacer en el Gran Espíritu que nos anima y alienta a ser mejores. Estos son días para reunirnos, para encontrarnos, para bendecir, y para invocar en ferviente plegaria, al Dios de todas las victorias, clamando por paz y bien, por paz y seguridad, por paz, tranquilidad y alegría para todas las familias que somos comunidad humana", continuaron.
Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy
"Estos son días para, desde el profundo cariño y los deberes y responsabilidades que todos tenemos, trabajar por el fin de toda guerra, toda agresión, todo lo que nos destruya y todas las miserias que debemos superar de la mano de Dios", agregaron.
En su mensaje, Ortega y Murillo desearon a todas las familias nicaragüenses y del mundo "paz, encuentro, cariño, suprema reconciliación, para vivir libres de todo mal, particularmente de la desgracia del egoísmo que esclaviza, y de la insolencia del odio, que mata".
