Policías antidisturbios usaron cañones de agua contra los manifestantes, algunos de los cuales lanzaron piedras a las fuerzas del orden.
En medio de los manifestantes, personas de todas las edades, se veía una banderola que se refería al actual presidente socialista François Hollande, electo en mayo pasado, indicando: “François, tus electores no quieren este aeropuerto”.
En la mañana del sábado, choques con la policía habían dejado heridos a dos opositores y un gendarme.
Según la prefectura, se arrestó a ocho personas, en la zona en la que se planea construir el controvertido aeropuerto.
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Al igual que el viernes, en la mañana del sábado, los opositores lanzaron botellas y piedras, mientras los gendarmes lanzaban gas lacrimógeno y granadas de estruendo.
El ministro del Interior reafirmó esta semana la “determinación total del gobierno” de llevar a cabo el proyecto y “hacer respetar la ley”.
Personas de todas las edades expresaban su indignación este sábado, inclusive hombres de más de 60 años que fueron afectados por las bombas de gas lacrimógeno.
“Tengo miedo que la furia se desborde”, dijo una manifestante, Geneviene Coiffard, una jubilada que se declaró partidaria de la “no violencia”.
Desde hace meses, los adversarios al proyecto están instalados en la zona, que se extiende en unas 1.650 hectáreas de tierras agrícolas.
El aeropuerto de Notre-Dame-des-Landes debe reemplazar al de Nantes en 2017 y el proyecto cuenta con el respaldo del primer ministro y ex alcalde de Nantes.
La semana pasada, una manifestación contra el proyecto reunió entre 13.500 y 40.000 personas, según las fuentes.
“Sentimos que la movilización gana fuerza, estamos en camino a la victoria, es evidente que este aeropuerto no será construido”, dijo una manifestante a una radio local.
Tres ministros ya confirmaron el sábado su apoyo al proyecto del aeropuerto.
La construcción y explotación del futuro aeropuerto, que deber costar más de 550 millones de euros, fue atribuida por 55 años al gigante francés de la construcción Vinci.
El aeropuerto debería recibir unos 4,5 millones pasajeros al año y todos los tipos de avión, incluyendo eventualmente al gigantesco Airbus A380.