El uniformado fue identificado como el Suboficial Edgar David Britez Chavez (34), y prestaba servicios en la comisaría de la localidad de General Artigas, Itapúa. Tenía antecedentes por homicidio doloso año 2017. Su acompañante, Gustavo Heleno Sosa (26), quien sería primo del policía, también murió producto de la balacera.
De acuerdo a los datos, el suboficial Britez estaba de día libre y posiblemente regresaba de su franco desde la localidad de Yuty, departamento de Caazapá, para retomar sus actividades en la comisaría de General Artigas. Ambos viajaban a bordo de un automóvil Toyota Premio, de color gris, propiedad del policía fallecido.
Según los primeros informes, el vehículo fue rociado con balas de grueso calibre, lo que permite suponer que fueron emboscados por más de una persona armada. El hecho ocurrió alrededor de las 17:00, a unos 1.000 metros de la comisaría de Potrero Benítez, y prácticamente sobre un puente que cruza un pequeño arroyo.
Al parecer los emboscados se ocultaron en un bosque que bordea el arroyo, cercano al puente, en una zona donde el terreno se caracteriza por ser llano y un gran descampado, sin población cercana.
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De las investigaciones preliminares se descarta que móvil del ataque haya sido con fines de robo y cobra fuerza la hipótesis de que se trataría de un crimen por encargo o un ajuste de cuentas.
El policía fallecido tiene antecedentes por homicidio doloso, del año 2017. Soportaba un proceso penal por el homicidio del político colorado y comerciante, Esteban Báez Vera, ocurrido durante un asalto en la localidad 3 de Mayo, departamento de Caazapá.
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El acompañante, también fallecido en la balacera, Gustavo Heleno Sosa, tenía orden de captura por el presunto hecho punible de apropiación, emanada de un juzgado de Villarrica.
Agentes del departamento de investigación de delitos todavía se encuentran en la zona recabando información sobre el hecho. De los atacantes no se sabe absolutamente nada hasta ahora, ni la cantidad, ni en qué tipo de transporte se movilizaban.
Brítez Sánchez y su camarada, Homero José Cibils Ramírez, fueron acusados debían estar con prisión preventiva por ser presuntamente los dos personas quienes se bajaron de un auto e intentaron asaltar el servicentro que era propiedad de Báez Vera, quién se resistió y por ello fue asesinado.