Agente de la Comisaría 15ª Metropolitana procedieron a detener entre la tarde y noche de hoy a Lino Gustavo Amarilla Martínez, un joven de 22 años de la parcialidad Mby’a Guaraní, oriundo de la comunidad Cerrito de Caazapá, sindicado por testigos como uno de los posibles asesinos de la pequeña, cuyo cadáver fue encontrado en estado de descomposición en un bolso arrojado en un terreno baldío detrás de la terminal, lugar frecuentado por nativos en situación de calle.
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“Yo ordené la detención del mismo, y de cualquier manera vamos a tener más informaciones y mañana vamos a imputar”, adelantó a ABC Cardinal la fiscala Noguera, quien además confirmó que la imputación será por homicidio doloso.
Si bien fue cautelosa con dar detalles sobre la investigación, coincidió con informaciones de la Policía Nacional que apuntan a que se está tras un segundo sospechoso por el crimen. “Sí, hay más; el entorno no es así nomás. No es fácil ese lugar; hay más”, respondió cuando se le consultó sobre más personas buscadas.
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Agentes de la comisaría 15ª Metropolitana indicaron que el otro buscado sería un ciudadano argentino, cuya identidad se reservan por el momento, hasta al menos lograr su captura. La Fiscala Noguera adelantó que también mañana estará realizando otras diligencias en la zona de Luque, a fin de tener más pistas.
“Hoy estuve en Curuguaty para reunirme con la familia y recabar algunos datos relevantes, ya que en forma conjunta estamos trabajando con este equipo y mañana estaré en Luque también y tenemos muchos datos que tenemos que ir confirmando”, afirmó.
Manifestación empañada
Esta tarde, un nutrido número de ciudadanos y miembros de organizaciones sociales de diversos sectores se congregaron en la esquina de Terminal de Asunción para realizar una manifestación pacífica con una serie de reclamos que finalmente se vieron diluidos en medio de la cantidad puntos planteados.
Si bien el foco central era pedir justicia por Francisca y también por otros niños asesinados de manera violenta, a través de la consigna “Con los niños no”, también hubieron sectores que reclamaban derechos de los pueblos originarios, como se el acceso a la tierra y la asistencia del Estado.
Si bien estos puntos no eran necesariamente contrapuestos, la falta de coordinación también se notó en la definición del itinerario de la marcha planificada, ya que inicialmente plantearon ir hasta frente a la comisaría donde se encuentra detenido el sospechoso del crimen, pero luego cambiaron para ir hasta el sitio donde se encontró el cuerpo de Francisca.
También en medio de la marcha, un participante recriminó a una de las oradoras, la exjueza de la niñez, Mercedes Buzó, quién pese a pedir justicia, fue recriminada por un pequeño grupo por supuestamente no cumplir con su rol de defensa de la niñez cuando estaba en el cargo. Esto provocó discusiones internas en el grupo que afortunadamente no pasaron a la violencia física.